En el país el 80% de la producción está controlada por grandes empresas. Del cultivo de aguacate se ha derivado contaminación de agua y pérdida de bosques, señala.
Se evitará que Sembrando Vida o cualquier otro programa público propicie el uso de parcelas o áreas de bosque que hayan sido limpiadas a través del fuego o desmonte.
El titular de la Comisión, León Jorge Castaños indicó que 34 por ciento ocurrió en selvas cálido-humedas; 25 por ciento en selvas cálido secas y 17 por ciento en sierras templadas