Es una base de actuación ética para las personas servidoras públicas de esta Secretaría, con el propósito de romper viejas prácticas como la obtención de ganancias privadas, provechos y ventajas personales.
Busca evitar corrupción, conflicto de intereses, acoso sexual, hostigamiento u acoso, así como cualquier otra conducta que transgreda la dignidad de las personas.