Lamentaron que la falta de profesionalismo y ética puso en riesgo la vida de víctimas de la desaparición forzada y desaparición cometida por particulares.
Además de considerar este tipo de violencia como una figura independiente del género, se estableció una agravante para los casos en que la violencia vicaria sea cometida por hombres en perjuicio de mujeres