Con pancartas, los extranjeros se concentraron frente a la alcaldía de esa localidad de la costa de Chiapas y dirigieron su manifestación a la presidenta Claudia Sheinbaum.
El grupo, que partió de Huixtla y llegó a Escuintla, decidió no avanzar hoy para descansar. Organizaciones brindaron curaciones en pies a los lesionados.
Los indocumentados partieron a las 4 de la mañana de Huixtla, donde pernoctaron, con la intención de llegar a Escuintla, situado a unos 30 kilómetros de distancia.
El contingente se concentró en el parque de Suchiate –en el lado mexicano– y se enfiló por la carretera internacional hacia Tapachula, donde pretenden hacer su primera escala.
El gobierno estatal los apoyó con camiones y camionetas para trasladarlos al municipio de Teotitlán de Flores Magón, colindante con el estado de Puebla.
Los extranjeros fueron detenidos en el desierto de Samalayuca, donde armados con piedras y palos se negaron a bajar del tren hasta que finalmente las autoridades los dejaron continuar.
Antes de las 5 horas de este jueves 400 migrantes centroamericanos tomaron la carretera federal 150. Se espera que mañana lleguen a Acultzingo y de ahí continuar hasta Puebla.