Personas con ambos requisitos e inscritos en el padrón serán visitados por capacitadores para notificarles y “sensibilizarles” sobre la importancia de participar como funcionariado de casilla.
Hombres y mujeres trans que hayan sido víctima de delitos y que hayan recibido atención de la Fiscalía podrán recibir hasta 60 mil pesos anuales para educación y capacitación.
Sólo las comunidades originarias en la entidad tienen derecho a integrar su propia policía, dijo Pavel Guzmán, coordinador del Consejo Supremo Indígena estatal.