Calhoun dijo que Boeing asumió la responsabilidad por el desarrollo de un sistema de software clave vinculado a los accidentes mortales de 2018 y 2019 en Indonesia y Etiopía, en los que murieron 346 personas.
El CST-100 Starliner, con dos astronautas a bordo, despegó de Cabo Cañaveral sobre un cohete Atlas V acondicionado y pilotado por United Launch Alliance.
El cambio ocurre luego que un avión de la aerolínea Alaska Airlines sufriera el desprendimiento de un panel del fuselaje en pleno vuelo el 5 de enero, lo cual llevó a un aterrizaje de emergencia.
United dijo que el primer vuelo MAX 9 con pasajeros a bordo desde el 6 de enero partió de Newark con destino a Las Vegas con 175 pasajeros y seis tripulantes.