La inflación en la eurozona cedió en marzo a 2.4 por ciento en términos anuales, 0.2 puntos porcentuales menos que lo registrado en febrero, acercándose al objetivo del banco central.
Dejó por quinta vez consecutiva sin cambios su política monetaria para ubicar el tipo de interés a 4.0%, nivel más alto desde el lanzamiento del euro en 1999.
La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, hizo mención a los riesgos inflacionarios ligados a los “salarios”, los “riesgos geopolíticos”.
La duración de la pauta, seguida por otros bancos, dependerá de cómo se comporte la inflación y del crecimiento en Estados Unidos, Europa y el Reino Unido.
El economista que sustituirá a Giuseppe Conte también anunció la lista de ministros que lo acompañarán “en la tarea de rescatar al país tras la pandemia”.
