De reciente aparición en el mercado mexicano. Se trata de un "producto completamente adictivo que no tiene leyendas de advertencia, se publicita en establecimientos comerciales y está al alcance de todos", alertan.
El mandatario, Miguel Ángel Quintero, ordenó la revisión de estos centros de atención privados, para evitar que sean refugio de gente dedicada a la delincuencia organizada.