Los rebeldes hutíes de Yemen iniciaron en noviembre una campaña de bombardeos con misiles y drones en el mar Rojo y el golfo de Adén contra buques que consideran vinculados a Israel.

La autopsia concluyó que había muerto por asfixia bajo el agua.

El país más pobre de la península arábiga que lleva inmerso en una guerra desde hace siete años ha dejado a cientos de miles de muertos y desplazados.

Los rebeldes hutíes condicionan la tregua al desbloqueo de los puertos yemeníes.

La resolución fue aprobada por 11 votos durante la sesión del Consejo de Seguridad del organismo.

Bachir Omar, portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja en el país, dijo que el balance de víctimas está aumentando tras el ataque en Saada.

Explotaron camiones cisterna en una planta de petróleo. Los rebeles yemenitas habían anunciado una campaña con Emiratos Árabes Unidos.

El recuento de Naciones Unidas seguramente es inferior a la realidad porque no se registran muchas muertes de niños, dijo James Elder vocero de la Unicef.

Los rebeldes "secuestraron, encarcelaron y maltrataron" a miembros de tribus que apoyaban a las fuerzas aliadas al gobierno.

El artefacto explotó en Adén, al sur de Yemen, contra un convoy de dirigentes gubernamentales.

La semana pasada, más de 100 combatientes murieron en Marib, escenario de violentos enfrentamientos desde febrero.

La medida se produce un día después de un ataque con drones contra una refinería de petróleo en Riad.

La agresión fue reivindicada por los rebeldes hutíes de Yemen. El fuego ya fue controlado. Autoridades no dieron detalles sobre posibles víctimas.

El viernes, más de 60 combatientes perdieron la vida en Marib, la jornada más sangrienta desde que empezara esta batalla.

Se trata de Burkina Faso, Sudán del Sur, el noreste de Nigeria y Yemen. Alertó que otras 16 naciones, incluida Venezuela, también corren alto riesgo.