Las autoridades apuntaron a Israel en lo que pareció ser un ataque sofisticado y remoto que hirió a más de 2 mil 700 personas en un momento de crecientes tensiones en la frontera con Líbano.
Los dos países, fronterizos, rompieron sus relaciones al inicio de la guerra civil en Siria en 2011, cuando una ola de protestas pacíficas contra el gobierno de Bashar al Asad fue brutalmente reprimida.
Bashar al Asad, tras años de aislamiento diplomático, abogó por una "nueva fase" en la cooperación regional en su intervención en la cumbre en Arabia Saudita.
Los lanzamientos de misiles se produjeron dos días después del lanzamiento de una treintena de cohetes desde Líbano, atribuido a organizaciones palestinas.
Desde el sismo del 6 de febrero, que causó cerca de 46 mil muertos en Turquía y Siria, las iniciativas solidarias se multiplican en la ciudad ya muy afectada por la guerra.
"Cincuenta y tres personas que recogían trufas fueron asesinadas en un ataque de terroristas de Daesh (acrónimo en árabe del Estado Islámico) al sudeste de la ciudad de Sojné".
"Queremos permitir que las familias turcas y sirias en Alemania puedan acoger a sus parientes de la región siniestrada, sin burocracia", señaló la ministra Nancy Faeser.
El número de víctimas mortales en ambos países ha superado ya a los de 1999, cuando un movimiento de similar intensidad causó más de 17, 000 muertos en Turquía.
La recién nacida fue encontrada todavía unida por el cordón umbilical a su madre muerta. Fue la única sobreviviente de toda su familia. Fue trasladada a un hospital cercano.
En Turquía, al menos 20 mil 534 heridos. En Siria, 3 mil 640. Continúa la búsqueda de sobrevivientes entre los escombros. Comienza a llegar la ayuda internacional.
Muchas personas siguen todavía bajo los escombros de edificios residenciales. El movimiento telúrico causó más de 2 mil 300 muertos en Turquía y Siria.
Si la comunidad internacional no interviene, el país podría enfrentarse a "otra ola de emigración masiva", declaró el director del Programa Mundial de Alimentos.