“Algunas ya pagaron algo y otras, incluso ya las tiene el procurador fiscal en revisión, para ver si acreditan la defraudación fiscal”, informó la titular del SAT.
La cantidad representa una quinta parte del gasto público de este año, dijo Raquel Buenrotro. La mitad de ese dinero es deuda de grandes contribuyentes.
La jefa del Servicio de Adminitración Tributaria dijo que los contribuyentes no deben “temer un ambiente de terrorismo fiscal y persecución que no habrá” ni se le cargara la mano a quien paga sus impuestos.