Es "absurdo" votar por mantener salas del PJ no contempladas en la enmienda al sector, dijo la ministra y reprochó faltas a lo previsto en remuneraciones.
“Nos toca guardar silencio y escuchar a las mujeres que marchan, que gritan en las calles. Las únicas voces que hoy se deben oír son las de ellas”, dijo.
“Incita a la violencia, atenta contra la integridad personal y divide gravemente a la sociedad, consecuencia de un discurso de odio hacia las funciones del PJF".
Ello no es privilegio de los jueces, sino el principio que garantiza una adecuada impartición de justicia para hacer efectivas las libertades e igualdad, dijo.