La falta de adherencia al tratamiento, mismo que generalmente está constituido por dos o tres antidiabéticos orales, es el principal inconveniente que enfrentan los pacientes con diabetes tipo 2.
Los precios, mal regulados y carecen de transparencia, critica. 90% del mercado está controlado por las farmacéuticas Eli Lilly, Novo Nordisk y Sanofi.