Decenas de aficionados lo esperaron en el aeropuerto Bourget y a la entrada del Parque de los Príncipes, pero el futbolista argentino continúa en Cataluña.
Señala que los franceses no cumplen con normas de juego limpio, que prohíben a los clubes pagar a sus plantillas una parte excesiva de sus ingresos totales.
Bajé 50% el valor de mi ficha, no me pidieron más, asegura. Creíamos que seguiría en el equipo, siempre fuimos sinceros, al menos de mi parte, asestó el argentino.