Se fue un gran hombre, el hombre que devolvió a La Habana Vieja su antiguo resplandor y potestad, que conoció su historia a profundidad y la cantó con elegante elocuencia en cada discurso y ponencia.
Eusebio Leal Spengler representa la memoria cultural del país. Era un martiano fervoroso y lúcido, excepcional hombre de letras y gran defensor de Cuba en todas las tribunas.