Ciudad de México. La inflación ha tenido menores repercusiones para los hogares de menores ingresos desde octubre del año pasado, particularmente en los precios relacionados con los alimentos, educación y recreación, planteó Banamex.
Según el banco, de octubre del año pasado hasta la primera quincena de mayo, la inflación general ha promediado 2.4 por ciento, pero para las familias de menores recursos el indicador se ubica en 2 por ciento.
En contraste, en los últimos siete años, la inflación general promedió 5.16 por ciento, mientras que en los hogares que gastan menos de un salario al mes –ocho mil 364 pesos— el indicador se situó en en 5.64 por ciento.
“La inflación de alimentos, que había sido más alta para los hogares con menores ingresos, en los últimos meses ha sido menor… Otros rubros que han favorecido a estas familias son educación y recreación”, dijo el área de estudios económicos de Banamex en una nota especial.
Buenas noticias
Lo anterior, expuso el banco, “son buenas noticias” si se considera que dicho indicador ha sido señalado como determinante de la pobreza en México.
“Con la información se puede concluir que, a diferencia de periodos anteriores, en meses recientes la inflación ha sido menor para quienes tienen ingresos más bajos, lo que contradice la idea tradicional de la inflación como un impuesto regresivo, que afecta más a los sectores de menores ingresos al erosionar su poder adquisitivo y agravar la desigualdad.
“Por tanto, el hallazgo de una inflación relativamente menor para los ingresos bajos es una buena noticia para el tema de la pobreza, ya que implica una menor pérdida real de poder adquisitivo para los más vulnerables, contribuyendo a una menor desigualdad en el corto plazo”, sostuvo.
Políticas públicas
Derivado de lo anterior, Banamex consideró que existe espacio para que las políticas públicas contribuyan más a los hogares de menores ingresos.
“No se puede dejar de lado la importancia de diversos programas sociales focalizados que estén dirigidos a apoyar a las familias con menores ingresos en los rubros específicos que pesen de forma relevante en la canasta de consumo de estas familias o que estén subiendo mucho en cierto periodo.
“Por otro lado, también se podrían requerir programas de aumento de oferta, así como identificar y resolver problemas de competencia que explican los sobre