Ciudad de México. Frente a la actual política de deportaciones masivas del gobierno de Donald Trump, México no está preparado para recibir a los ciudadanos mexicanos que sean devueltos de manera forzada al territorio nacional, advirtieron organizaciones migrantes que trabajan en Estados Unidos, que además lamentaron el crecimiento de actitudes xenófobas en aquel país.
Durante un foro realizado en la Cámara de Diputados, Francisco Javier Moreno Castillo, dirigente del Consejo de Federaciones Mexicanas (COFEM), señaló que existe una deuda histórica y moral con las personas migrantes y alerto que no contarán con espacios suficientes para desarrollarse en México, tras ser deportados.
“Esperamos que cuando menos encuentren dónde venir a trabajar. De repente van a llegar aquí, pero ¿a qué van a llegar? ¿A estar en su pueblo, a emborracharse? Y no van a ser miles, van a ser millones de mexicanos que van a llegar y el gobierno no va a saber ni qué hacer con ellos”, advirtió.
Por su parte, Raúl Murillo, presidente de Hermandad Servicios Comunitarios, rememoró que en 2006 hubo movilizaciones masivas en todo Estados Unidos para repudiar la iniciativa de ley HR4437, que pretendía criminalizar a los migrantes y a instituciones que les ayudaran, y aunque lograron el retiro de la medida, creció un sentimiento anti-migrante que “sofocó al movimiento”.
En el foro participó el secretario de Educación Pública, Mario Delgado, quien afirmó que, por instrucciones de la presidenta Claudia Sheinbaum, se garantiza que se garantizará a todos los niños, jóvenes y adolescentes, el ingreso a una educación, sin importar su origen o condición migratoria.
Cualquier niño o niña que llegue a México, enfatizó, “debe ser recibido en las escuelas. De repente hay barreras burocráticas, (pero) un trámite no puede ser el impedimento para ejercer un derecho constitucional, por eso hay la instrucción dentro de todo el sistema educativo nacional de que primero se reciben a los niños y luego acompañamos en toda la parte oficial de registro”.
Víctor Alejandro Espinoza, presidente del Colegio de la Frontera Norte, afirmó que los migrantes de retorno “merecen la atención del Estado mexicano porque son mexicanos: mandan casi 65 mil millones de dólares de remesas y 14 millones de transacciones, además que sostienen cinco millones de hogares”.