Una mexicana indocumentada a punto de ser deportada, una abogada inmigrante que también carga con el miedo constante al sistema y una hija pequeña separada por las políticas migratorias son los ejes emocionales de I’m a Dreamer Who No Longer Dreams, ópera contemporánea que se presentará por primera vez en México el 9 y el 11 de mayo, en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris.
Estrenada en 2019 en el Emerson Paramount Theatre de Boston, Estados Unidos, por la compañía White Snake Projects, esta obra trata sobre uno de los fenómenos más urgentes del siglo XXI: la migración. La dramaturga de origen singapurense Cerise Lim Jacobs escribió el libreto inspirado en temas reales, y la música corre a cargo del compositor mexicano Jorge Sosa.
La ópera forma parte del ciclo Identidades Migrantes, de la compañía Escenia Ensamble, que contempla el estreno de cuatro títulos líricos en tres ciudades mexicanas bajo la dirección de tres directores.
Sororidad , maternidad y empatía
En conferencia de prensa, Ragnar Javier Conde Knape, productor general y director, explicó que la pieza “trata temas muy importantes, como la sororidad, la maternidad –lo que puede hacer una madre por darle una mejor vida a sus hijos– y la empatía. Explora también las razones por las cuales estas personas emigraron en un primer instante”.
En la puesta en escena participan las sopranos Mariela Angulo (Rosa) y Tania Solís (Singa), acompañadas por un elenco de más de 80 niños, en un esfuerzo colectivo que suma voces corales, actores infantiles y músicos. La Camerata Escénica, integrada por miembros de las orquestas más destacadas del país, estará a cargo de la concertación musical de Alberto Alonzo.
Ha sido un grato descubrimiento trabajar esta ópera. Desde lo musical proponemos una versión reducida para cuerdas, percusiones y piano, que busca equilibrar la teatralidad del drama con la teatralidad a través de la música, dijo Alonzo. Además es muy interesante ver cómo el compositor combina elementos del folclor mexicano en una narrativa universal.
Ruth Escalona Cruz, directora del Coro Metropolitano Huitzilli, planteó el desafío que representó para los menores participar en esta presentación: “Montar esta ópera ha sido una experiencia enriquecedora. Salieron de su repertorio habitual, uno que tenemos muy bien jugado, para enfrentarse a nuevos retos, y eso es muy bueno para expandir sus capacidades.
Una parte muy valiosa es cuando la madre anima a la niña mediante historias de su pueblo, de una historia maya y una historia china, lo que revela que a través del bagaje cultural de nuestros países podemos dar esperanza, coraje y valor, y hacer de una experiencia complicada algo más llevadero, agregó Escalona Cruz.
I’m a Dreamer Who No Longer Dreams tiene escenografía, iluminación y proyecciones diseñadas por Pedro Pazarán y Chava Banuva; el vestuario estuvo a cargo de Brisa Alonso.
Jozef Olechowski, pianista y director de Escenia Ensamble, expresó su alegría por participar en esta puesta en escena, donde se siente identificado con la temática: “En esta ocasión somos siete músicos participantes, cuatro de los cuales somos inmigrantes. Llevamos décadas en México, país noble que nos recibió con los brazos abiertos, y donde la frase más contundente para describir cómo nos identificamos con este país es el famoso dicho de Chavela Vargas, de que los mexicanos nacen donde se les da la gana.
Esta ópera pone en el centro un problema generalizado, más allá de un país en concreto. Resalta valores como la justicia, la tolerancia, la comprensión, la unión familiar. Es un proyecto que nos enorgullece.
Sobre la exigencia técnica de la obra, pidió al público que no se asuste cuando escuche términos como ópera y ópera contemporánea. Puedo asegurarles que es un lenguaje sencillo, melódico y accesible para el público en general. Es una experiencia poderosa, tanto para quienes amamos la música como para quienes buscan historias conmovedoras.
Ana Silvia Sánchez Islas, quien interpreta a Prosecutor, se pronunció por generar reflexión: esperamos que permitan ser tocados por nuestras voces, por nuestra actuación, por la música, y que eso cambie la manera en que sentimos este mundo hoy día.
Para este proyecto contamos con la dirección de Ragnar, que tiene gran experiencia para adentrarnos a conocer, entender y vivir estos personajes, que no se quedan en lo superficial, sino que van más allá, porque sólo así podemos transmitir un mensaje que toque, agregó Lidia Jessica García González, quien interpreta a Mother.
Las funciones están programadas para el 9 y el 11 de mayo a las 20 y 17 horas, respectivamente, en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris (Donceles 36, Centro Histórico), con boletos de 204 a 708 pesos en taquilla o por Ticketmaster.