Para la elección judicial del domingo 1 de junio no habrá boletas para invidentes, a diferencia de otros comicios, desde el año 2003, debido a que el Instituto Nacional Electoral (INE) no tuvo ni el dinero ni el tiempo suficiente para gestionar este apoyo.
Las consejeras Dania Ravel, Carla Humphrey y Claudia Zavala lamentaron el hecho al cual calificaron como una regresión.
Dijeron que la población con discapacidad visual, así como aquellas personas que no saben leer o las que están impedidas físicamente para marcar la boleta podrán ser asistidas en la casilla, por un acompañante de su confianza.
Sin embargo, lo ideal habría sido facilitar el marcado, en particular con el sistema Braille, como lo solicitó el Organismo mexicano promotor del desarrollo integral de las personas con discapacidad, así como dos ciudadanos.
Los métodos de apoyo a la población invidente se aplicaron en comicios anteriores, de 2003 a la del año pasado.
Para la primera elección judicial la votación será completamente diferente, porque los electores no marcarán emblemas de partidos, sino que colocarán números en recuadros, correspondiente a cada uno de los candidatos.
Es decir, se requiere identificar cada una de las seis boletas; leer cientos de nombres de contendientes, ubicar al candidato seleccionado y escribir los números correspondientes en la parte superior de cada boleta.
Humprhey también destacó el hecho de que en su momento no se admitió otro modelo de boleta o el uso de herramientas tecnológicas para sufragar.
Al responder a los interesados, por orden del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Zavala señaló al respecto que el diseño de la elección dejó al INE en una situación compleja.
“Sí es de lamentar que hoy tengamos que dar una respuesta en ese sentido, pero no tenemos de otra...Es muy lamentable que tengamos una regresión en términos de garantías de derecho y la eficacia de los derechos debido a estas regresiones evidentemente también van en contra de lo que el artículo primero constitucional nos instruye”, dijo.
La consejera Zavala indicó que el INE tiene para esta elección un “presupuesto deficiente” por decisión del Poder Legislativo, y también plazos muy cortos para una reforma de gran calado.
Agregó que a la luz del actual contexto, el modelo de boleta tiene que ser analizado al término del proceso en curso.
“El hecho que no tengamos la posibilidad de una plantilla braille por los más de 150 modelos de boletas, los nombres y los números, esto no quiere decir que no tengamos un efoque de sensibilidad que dentro de nuestras posibilidades estamos implementando”, indicó, al anunciar que deberá haber un modelo especial, para personas con discapacidad visual, de práctica del voto.
Al final del punto se aprobó un agregado, con ocho votos a favor con tres en contra (Taddei, De la Cruz y Montaño) para que el sistema braille sí se implemente en futuras elecciones.
La consejera presidenta, Guadalupe Taddei, dijo que votaba en contra porque esa opción debe partir de una instrucción de la Secretaría Ejecutiva del INE y no como una respuesta a una consulta ciudadana.