Luego de reconocer el diálogo que inició la Secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, con colectivos de buscadores de personas desaparecidas, para atender esa “tragedia”, el Partido del Trabajo (PT) sostuvo que no se puede cerrar los ojos ni omisos ante “una realidad tan dolorosa que nos lastima como mexicanos”.
El dirigente nacional petista, Alberto Anaya Gutiérrez, dijo que los legisladores de su partido “están dispuestos a impulsar la iniciativa presidencial que contempla un nuevo marco legal para atender esta grave problemática que nos afecta como nación”, al tiempo que destacó su instrucción de que cualquier funcionario que no cumpla con su trabajo quedará fuera del gobierno federal.
Además, celebró “que se abran espacios de análisis en materia de desapariciones, con el propósito de escuchar las voces de las distintas instancias de gobierno, organizaciones civiles, académicos, y lo más importante, de las familias de las personas desaparecidas”, y afirmó que “este grave problema no se puede ignorar, por el contrario, hay que empeñar todos los recursos del Estado mexicano para ofrecer una solución a las miles de familias afectadas que viven en la angustia y zozobra por saber el paradero de sus seres queridos”.
Por medio de un comunicado, el dirigente partidario expresó a nombre de su partido su “respeto y resiliencia hacia las familias que han perdido a un ser querido y aún no lo encuentran” y aseveró que apoyarán cualquier iniciativa que abogue por el esclarecimiento de cada caso de desaparición en el país.
Por su parte, ante lo que consideró como una “crisis de desapariciones” en el país, el Partido Acción Nacional (PAN) insistió en la creación un fondo y un programa de apoyo a madres buscadoras, para que puedan contar con "herramientas”, a la vez que planteó que los buscadores puedan tener acceso a las carpetas de investigación de sus casos.
A través de un comunicado, el blanquiazul propuso también la creación de una comisión internacional de expertos que brinden orientación; dar mayor enfoque a la prevención de las desapariciones, y convocar a un parlamento abierto para escuchar a las víctimas y a sus familias.
Luego de que el jueves pasado integrantes del partido realizaron una protesta frente a las instalaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), el dirigente nacional del instituto político, Jorge Romero, reiteró su exigencia de que la titular del organismo, Rosario Piedra, renuncie a su cargo, al señalar que ha sido “indiferente” ante los casos de desapariciones en el país.
“En el PAN no venimos a sacar ventaja electoral ni a señalar colores, esto aplica para todos los gobiernos. Venimos a decir lo que exigimos y que no quieren escuchar desde el poder: que ni un joven más sea desaparecido, que ni una madre más tenga que buscar sola, y que el Estado cumpla con su deber más básico: proteger la vida”, indicó Romero.