Por primera vez en lo que va de la legislatura, Morena no logró ayer la mayoría calificada en el Senado y no pudo aprobar el nombramiento de 56 magistrados de tribunales electorales locales en 30 entidades.
La lista que dio a conocer el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Adán Augusto López Hernández, obtuvo 72 votos a favor y 38 en contra, por lo que a los guindas les faltaron tres sufragios para alcanzar las dos terceras partes de los senadores presentes en el salón de plenos.
La causa del tropiezo, que la oposición festejó con la consigna sí se pudo, sí se pudo, no sólo fue la ausencia de morenistas que estaban de viaje, sino algo más importante: la inconformidad que provocó el involucramiento de los gobernadores en las designaciones, se comentó entre los legisladores del partido mayoritario.
Destacaron casos como el de Guerrero, donde se pretendió colocar como magistrado a un cuestionado priísta; el de Michoacán, donde se designó a una persona que ha atacado a candidatos de Morena, o el de la Ciudad de México, cuyos seleccionados ni siquiera eran conocidos, pero habrían sido colocados en la lista a petición del diputado Ricardo Monreal; la jefa del Gobierno capitalino, Clara Brugada, y la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez.
La molestia se hizo evidente desde que en la reunión previa de la bancada se presentó la relación de los candidatos seleccionados sin que los senadores fueran consultados antes.
Ante el resultado de la votación, el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, aceptó que se requería un poco más de procesamiento y puntualizó que lo que sucedió es “un llamado de atención… que obliga a la reflexión, a hacer de lado la arrogancia y hacer mejor las cosas. Me parece que tenemos que fortalecer la unidad y mejorar nuestros mecanismos de acuerdo”.
No obstante, rechazó que sea un descalabro, pues subrayó que estuvieron muy cerca de la mayoría calificada. Si la oposición es lo que puede celebrar, uy, le esperan seis años de mucha tristeza y poca celebración.
Triunfo momentáneo
El panista Marko Cortés asumió lo sucedido como un triunfo momentáneo y advirtió que la oposición debe estar completa para la sesión en la que se presente la nueva lista, con propietarios y suplentes, para evitar un deterioro mayor del Poder Judicial.
La mesa directiva destacó que las nuevas propuestas de magistrados deberán presentarse a la brevedad, por lo que no se descarta que este miércoles se vuelva a abordar el tema en el pleno senatorial.
Previamente, los coordinadores del blanquiazul, Ricardo Anaya, y de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda, denunciaron que en la integración de la lista hubo un cochinero y que Morena pretende quedarse con el control total y absoluto de los tribunales electorales, lo cual daría pie a regresar a las épocas de los fraudes.
Anaya denunció el caso de Guanajuato, donde se seleccionó a Jasmine Anabel Carmona, quien no acredita experiencia electoral, pese a que es uno de los requisitos para ser magistrado, y el de Guerrero, donde se pretende imponer al consejero jurídico del estado, aunque la ley lo prohíbe.
Durante el debate, los senadores de Chihuahua Javier Corral y Mario Vázquez cruzaron acusaciones luego de que el segundo rechazó la posible designación de Adela Alicia Jiménez Carrasco como magistrada electoral en aquella entidad, porque –aseguró– es sumisa al poder.
El ex gobernador de Chihuahua aseveró que nada tuvo que ver en la selección final de los aspirantes y acusó a Vázquez de ser mandadero del también ex gobernador César Duarte y la actual mandataria estatal, María Eugenia Campos.