Londres. El mundo que conocíamos desapareció, afirmó ayer el primer ministro británico, Keir Starmer, luego de la salva de aranceles impuesta por Estados Unidos.
La decisión del presidente Donald Trump de imponer derechos aduanales de al menos 10 por ciento a gran parte de los productos importados por Estados Unidos significa que los antiguos postulados ya no deben ser considerados algo garantizado, dijo Starmer en un artículo publicado en el diario conservador The Sunday Telegraph.
El nuevo mundo está menos regulado por reglas establecidas y funciona más por acuerdos y alianzas, puntualizó.
La decisión estadunidense ha causado pánico en los mercados financieros en días recientes.
El fin de semana los dirigentes europeos se pusieron en contacto y los ministros de comercio exterior de los países de la Unión Europea se reunirán el lunes en Luxemburgo para preparar la respuesta europea a Estados Unidos.
Tras una conversación telefónica con Starmer, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, criticó el daño que estos gravámenes implican para todos los países, tanto por sus efectos directos como indirectos, incluyendo a las naciones más pobres del mundo.