Nuevo Laredo, Tamps. Un tribunal de enjuiciamiento condenó a 40 años y nueve meses de prisión a cuatro cabos del 16º Regimiento de Caballería Motorizada por los delitos de homicidio calificado y homicidio calificado en grado de tentativa. Los militares fueron sentenciados por su participación en la masacre de cinco jóvenes ocurrida el 26 de febrero de 2023 en Nuevo Laredo, Tamaulipas. Así lo informó Raymundo Ramos Vázquez, presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo.
Los militares sentenciados, identificados como Juan Carlos Gámez Mendoza, Agustín Cornelio Sánchez Reyes, Bernardo Reyes Sánchez y Jorge Nicolás López, permanecen bajo custodia de la Guardia Nacional en el Campo Militar Número 1 mientras su sentencia no quede firme. Además de la pena de prisión, la resolución judicial establece que el comandante del 16º Regimiento de Caballería Motorizada deberá ofrecer una disculpa pública a las familias de las víctimas.
Los hechos ocurrieron cuando los jóvenes regresaban de una discoteca, tras celebrar que uno de ellos, Gustavo Ángel Suárez Castillo, estaba a punto de ser padre. En su trayecto hacia sus domicilios, fueron perseguidos y atacados a balazos por militares en el crucero de Méndez y Huasteca, causando la muerte de Gustavo Ángel Suárez Castillo, Wilberto Mata Estrada, Jonathan Aguilar Sánchez, Alejandro Trujillo Rocha y Gustavo Pérez Benítez. Otros dos jóvenes lograron sobrevivir al ataque.
En una conferencia de prensa posterior al anuncio de la sentencia, familiares de las víctimas y abogados del Comité de Derechos Humanos denunciaron que los jóvenes fueron criminalizados en redes sociales y medios afines a las fuerzas armadas, lo que agravó aún más la situación. Exigieron justicia y que se tomen medidas para evitar más casos de violencia militar contra civiles en la región.
Asimismo, Raymundo Ramos aprovechó para pedir a la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, la destitución del general brigadier, Miguel Ángel Ramírez Canchola, actual comandante de la Guarnición de la Plaza en Nuevo Laredo, por su presunta implicación en ejecuciones extrajudiciales.
Para evitar ser investigado en la carpeta de investigación FED/TAMP/NVO.LAR/00001719/2021 el coronel Ramírez Canchola, fue reubicado en las oficinas centrales de la Secretaría de la Defensa Nacional y regresado a Nuevo Laredo en octubre de 2024, fecha en que una enfermera, una niña de 8 años y un joven que se encontraba en calidad de secuestrado fueron acribillados por soldados del Ejército Mexicano y Guardia Nacional, respectivamente.
Otra víctima del personal militar bajo el mando del general Ramírez Canchola, es Esteban Durán Álvarez, de 47 años, quien el pasado 20 de noviembre de 2024 fue detenido por un grupo de militares y después de ser torturado hasta causarle la muerte fue abandonado en un predio de la colonia El Bayito.
Por estos hechos la Fiscalía General de la República inició la carpeta de investigación FED/TAMP/NVO.LAR/0003064/2024 mientras que la Comisión Nacional de Derechos Humanos abrió el expediente de queja CNDH/2/2024/17820/2024.