Después de ocho años del asesinato de Miroslava Breach, corresponsal de La Jornada en Chihuahua, la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la Fiscalía General de la República (FGR) tiene pendientes de cumplimentar dos órdenes de aprehensión contra importantes participantes en el caso: Crispín Salazar Zamorano, El Tío Pin –actual líder de Los Salazar, grupo de traficantes y sicarios al servicio del cártel de Sinaloa–, señalado como autor intelectual del homicidio, y su sobrino Jasiel Vega Villa, quien se encargó de la logística para atacarla.
Durante el juicio en el que se sentenció a 50 años de prisión a Juan Carlos Ochoa, El Larry, copartícipe del asesinato y conductor del auto en que huyó del lugar Andrés Zavala Corral, autor de los disparos cuando Miroslava Breach salía de su domicilio a bordo de su camioneta para llevar a su hijo a la escuela, se confirmó que la orden de privarla de la vida provino de Salazar Zamorano.
La periodista había publicado en estas páginas información que molestó a integrantes de Los Salazar, ya que además de sus nexos con el cártel de Sinaloa para traficar drogas a Estados Unidos, pretendían poner a varios de sus familiares de candidatos a diversos cargos locales por diferentes partidos políticos.
En 2016, Miroslava Breach, quien era reconocida por su entrega y valentía para escribir sobre temas de narcotráfico, violaciones a derechos humanos en comunidades indígenas y abuso de poder, publicó un reportaje en el que puso al descubierto que en los municipios de Chínipas, de donde ella era originaria, Urique, Guazapares y Bachíniva, los grupos de narcotraficantes habían impuesto de candidato único a la alcaldía a un familiar directo de Los Salazar.
Su trabajo periodístico causó impacto y obligó a los partidos a cambiar sus listas de abanderados y sacar de ellas a los familiares de Adán Zamorano, Don Adán –fundador de Los Salazar y padre de Crispín–, quien se habría enfurecido por ello.
Eso generó enojo, así lo declararon varios testigos que presentó la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión (Feadle), durante el juicio de El Larry.
Uno, con identidad clave Apolo, dijo al juez de la causa: estaban enojados, estaban encabronados por lo que estaba diciendo Miroslava.
Según los testimonios aportados, en febrero de 2017 la corresponsal de La Jornada volvió a tocar el asunto de la narcopolítica en los municipios de la sierra de Chihuahua.
Eso fue un mes antes del ataque que la privó de la vida. La información que se hizo pública entonces señala que Crispín Salazar Zamorano, El Tío Pin, ordenó a Juan Carlos Moreno la muerte de Miroslava.
Durante más de dos décadas, Miroslava Breach investigó temas de narcotráfico y su relación con políticos de Chihuahua, así como abusos contra la comunidad rarámuri. Foto ‘La Jornada’
El Larry fue sentenciado a 50 años de prisión por ser copartícipe del homicidio. Él fue quien condujo el auto del que descendió Andrés Zavala Corral para dispararle.
De acuerdo con el expediente del caso, del cual La Jornada posee una copia, el 23 de marzo de 2017, a las 7:06 horas, la corresponsal de este diario esperaba en su camioneta a que su hijo saliera de su casa, ubicada entre las calles José María Mata y Río Aros, en la colonia Las Granjas, para llevarlo a la escuela.
El niño olvidó un material escolar y por ello tuvo que bajar del vehículo y volver a entrar a la casa. No había salido en su totalidad de la cochera. La periodista lo esperaba.
En tanto, minutos antes de que ella saliera, a unos 200 metros de su casa, Zavala Corral bajó del auto que lo llevó hasta ahí y se apostó cerca.
Mientras ella aguardaba por su hijo, el homicida se colocó frente a la camioneta y abrió fuego, luego caminó hacia el lado del conductor y volvió a disparar. La tercera vez accionó el arma calibre 9 milímetros desde la parte trasera y dejó una cartulina con un mensaje con el que se pretendió desviar la agresión como un acto realizado por organizaciones rivales de Los Salazar.
A ocho años de distancia, Hugo Amed Schultz, en ese entonces alcalde de Chínipas, pidió a integrantes de la dirigencia estatal del PAN que lo ayudaran a conocer las fuentes que proporcionaron datos sobre narcopolítica a Miroslava Breach.
Gracias a la intervención de los panistas José Luévano Rodríguez, dirigente estatal del blanquiazul en 2017, y Alfredo Piñera Guevara, entonces vocero local del partido, se realizó y grabó la llamada a la periodista que solicitó el entonces alcalde de Chínipas, en la que se le exigió que revelara las fuentes de la información que daban sustento a las publicaciones que evidenciaron narcocandidaturas en la sierra de Chihuahua. Miroslava se negó a revelar sus fuentes.
Ambos ex dirigentes panistas fueron protegidos por Corral Jurado, a pesar de que él se decía uno de los amigos de la corresponsal de La Jornada.
Así, Schultz entregó la información a El Larry y éste, a su vez, la hizo llegar a Salazar Zamorano. De esa manera surgieron las amenazas de muerte para Miroslava.
Como parte de las investigaciones, Hugo Amed Schultz fue detenido en diciembre de 2020 y sentenciado a ocho años de cárcel en junio de 2021. Recientemente pidió el beneficio de la reducción de pena por buen comportamiento. Aún no se define la audiencia para analizar la solicitud. Autoridades federales señalan que aunque Schultz se convirtió en testigo colaborador y ello sirvió para obtener la órdenes de aprehensión contra Salazar Zamorano y Jasiel Vega Villa, se opondrán a que se reduzca la sanción impuesta.