Ciudad de México. Estudiantes de diversas facultades y escuelas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), integrantes del Frente Alimentario Estudiantil, instaron a la máxima casa de estudios a que atienda su demanda de disponer de comedores subsidiados. Expusieron que estos servicios están concesionados y el más caro en Ciudad Universitaria es el de la Facultad de Arquitectura, donde el “menú universitario” -que incluye sopa, plato fuerte y un vaso de agua- alcanza los 96 pesos, cuando hay alumnos que apenas tienen para los pasajes.
“La creciente presencia de cafeterías concesionadas junto con la intervención de empresas privadas en la universidad y sobre nuestros espacios han resultado en un incremento desmedido en el precio de los alimentos, vulnerando nuestro acceso al derecho más humanamente básico como lo es el de una alimentación digna”, señalaron.
Indicaron que a esta situación se suman “las deficiencias” en la entrega de becas alimenticias, “las cuales resultan ser selectivas, restrictivas e insuficientes”. Manifestaron también su rechazado a que los estudiantes tengan que aspirar a un apoyo económico de este tipo “como si la posibilidad de alimentarse dignamente dependiera de nuestro mérito y no de un derecho humano fundamental”.
En conferencia de prensa, alumnos de las facultades de Arquitectura, de Ingeniería, de Filosofía y Letras, así como la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón, la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) Mérida y de preparatorias, entre otros, lamentaron que siendo la UNAM la que más presupuesto tiene, con 58 mil 85 millones de pesos para este año, no cuente con comedores subsidiados como la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Mencionaron que esta demanda ya ha sido entregada a Rectoría en diversas ocasiones este año, y que a la fecha no ha habido una respuesta efectiva. Reconocieron que la UNAM en alianza con el gobierno de la Ciudad de México podrían abrir comedores comunitarios -como se expuso esta semana-, pero enfatizaron que esto apenas está proyectándose para las preparatorias y los colegios de ciencias y humanidades, y desconocen cómo se pondría en marcha.
Una joven de la FES Aragón compartió que en su caso puede llegar a gastar entre 50 y 100 pesos diarios en comida, mientras que otra estudiante de la ENES Mérida expuso que ha alcanzado los mil pesos al mes.