Al considerarlo como una grave amenaza gravemente la vida marina del Golfo de California, 30 organizaciones ambientalista pidieron en una carta a la Unesco y a la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza tomar medidas urgentes contra el desarrollo del proyecto Saguaro de gas natural licuado en Puerto Libertad, Sonora.
“México tiene la increíble fortuna de contar con el maravilloso Golfo de California, y amenazar ese entorno único con un proyecto de combustibles fósiles es una completa imprudencia”, declaró Alex Olivera, científico y representante del estadunidense Centro para la Diversidad Biológica, que reunió a las organizaciones en su misiva.
Agregó que “las colisiones con barcos matan ballenas en todo el mundo, sin embargo, este desarrollo perjudicial traería enormes buques metaneros a una de las pocas regiones donde las ballenas han encontrado históricamente relativa seguridad”.
Señaló que la “comunidad internacional debe intensificar sus esfuerzos y defender el ‘acuario del mundo’ y su valiosa fauna. El Golfo de California es irremplazable, y no nos quedaremos de brazos cruzados mientras se sacrifica en aras de las ganancias corporativas”.
El proyecto, propuesto por la empresa estadunidense Mexico Pacific, transportaría gas natural licuado desde la cuenca Pérmica hasta una enorme planta mexicana en Sonora, antes de ser exportada a los mercados asiáticos, explicó el centro.
Agregó que el aumento del tráfico marítimo y la actividad industrial en el Golfo de California, uno de los ecosistemas marinos con mayor biodiversidad del mundo, tendría graves consecuencias para la vida marina y las áreas protegidas.
El sitio, a menudo llamado el "acuario del mundo", alberga 43 especies de mamíferos marinos, incluyendo un tercio de las especies de ballenas y delfines del mundo. Entre ellas, ocho especies están clasificadas como amenazadas, lo que destaca la importancia ecológica de la región y la urgente necesidad de esfuerzos de conservación.
El aumento del tráfico de buques metaneros expondría a las ballenas azules, las ballenas de aleta, los cachalotes y otros mamíferos a un mayor riesgo de colisiones con barcos, contaminación acústica y degradación del hábitat.
El proyecto también plantea importantes amenazas climáticas, debido a que el gas natural licuado es una fuente importante de emisiones de metano, que genera efectos invernadero aproximadamente 80 veces más potente que el dióxido de carbono a corto plazo.