Ciudad de México. Mazda presentó la estrategia de electrificación con la que afrontará dureante los próximos años una transición hacia la movilidad eléctrica que involucra a todos sus clientes en el mundo.
El presidente y director ejecutivo de Mazda Corporation, Masahiro Moro, junto con su equipo de ejecutivos, anunció tres componentes clave que permitirán a la compañía abordar con flexibilidad la era de la electrificación con rumbo a objetivos trazados hacia el año 2030.
El primer componente es la estrategia de activos eficientes, con el que Mazda optimizará inversiones en baterías y otras áreas, al reducir el monto originalmente estimado en 2 trillones de yenes a un aproximado de 1.5 billones de yenes con colaboraciones y asociaciones como la hecha con Changan Automobile, al igual que Toyota, Denso y BluE Nexus.
La segunda es el plan multi solución, donde la armadora ofrecerá opciones de propulsión desde motores de combustión interna, híbridos o eléctricos a batería, dependiendo de cada región a nivel global.
Y la tercera es la innovación monozukuri 2.0, con la que Mazda desarrollará vehículos cuyo enfoque sea la eficiencia, orientado al desarrollo y producción; asunto que involucra a todas las motorizaciones para conseguir un avance significativo para 2030.
“A medida que la industria automotriz atraviesa un cambio sin precedentes, Mazda sigue evolucionando para actualizar nuestra ‘emoción del manejo’ en la próxima generación de vehículos. Todos en Mazda estamos comprometidos con encontrar el equilibrio adecuado entre una gestión empresarial eficiente y el desarrollo de tecnología sostenible para ofrecer un valor único, sin importar la escala del negocio”, dijo Masahiro Moro.
Para apuntalar estas estrategias se hará uso de tres tecnologías que incluyen el Skyactiv-Z, motor que tiene mejoras en la eficiencia de combustible y de desempeño que se basa en el sistema híbrido de Mazda y se verá por primera vez en la nueva Mazda CX-5 que se lanzará en 2027.
Los vehículos eléctricos y la producción evolucionada son las otras dos tecnologías que reforzarán la estrategia de Mazda, y en las que se tiene contemplada la producción del primer vehículo eléctrico de la armadora para 2027.