Ciudad de México. Los aranceles de 25 por ciento impuestos a exportaciones de México y Canadá por parte de Estados Unidos no sólo ponen en riesgo el sistema de coproducción de la región T-MEC, sino que con esto sólo ganarán los competidores globales como China, señaló la American Chamber México (Amcham).
El organismo del sector privado, que aglutina a empresas mexicanas y de capital estadunidense, indicó que socavar la asociación del T-MEC debilita al bloque, pues entrega “ventajas estratégicas a los competidores que no comparten nuestros valores o visión económica”.
Indicó que en los últimos 34 años los tres países han construido una economía regional fuerte y competitiva, lo cual se ha reflejado en el crecimiento económico y la creación de empleo en los tres países.
Refirió que el comercio total de bienes y servicios entre los socios del T-MEC aumentó más de 50 por ciento entre 2021 y 2023, según datos de la Oficina de la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés).
“Esto no se trata solo de comercio, se trata de la coproducción, un sistema en el que construimos y competimos juntos y nos basamos en las fortalezas de los demás”.
Resaltó que las importaciones de México contienen más del doble del valor añadido estadunidense en comparación con las importaciones del resto del mundo, y casi 10 veces más que las importaciones de China.
Anotó que México también es el mayor comprador de productos fabricados en Estados Unidos de pequeñas y medianas empresas, comprando 2.2 veces lo que compra China y más que Japón, Corea del Sur, India, Suiza, los Países Bajos y Alemania juntos.
“Los aranceles ponen todo esto en riesgo. Imponer aranceles a un sistema de coproducción sería contraproducente. Lo hemos visto desde la reacción instantánea de los mercados, el miedo de los pequeños y medianos productores, hasta el aumento predictivo de los precios de los automóviles y la inflación. Los únicos ganadores reales son nuestros competidores globales, especialmente China”, destacó.
Consideró que los tres países pueden construir sobre una fórmula ganadora que fortalezca la posición de América del Norte como el bloque económico más dinámico del mundo.
“Es el momento de redoblar la cooperación, la estabilidad y la prosperidad compartida. Confiamos en que las autoridades encontrarán una solución constructiva que respete el marco legal binacional y las directrices establecidas en el T-MEC”, dijo.