San Francisco. Jimmy Butler hizo su debut en casa ahora con los Warriors de Golden State con una contundente victoria por 126-102 ante los Mavericks de Dallas en la NBA, un duelo donde Stephen Curry fue clave para el triunfo.

Butler, quien dejó hace dos semanas al Heat de Miami, sólo había jugado como visitante con su nuevo equipo Golden State. Así, ahora se presentó frente a la afición de los Warriors con una destacada actuación al sumar 18 puntos.

Stephen Curry también cumplió como jugador estrella de los Warriors al anotar 30 unidades para liderar la victoria. Por los Mavericks, PJ Washington y Kyrie Irving registraron 17 puntos.

Los Warriors retiraron el número de Andre Iguodala después del partido. El alero ayudó a la franquicia a ganar cuatro campeonatos y fue el Jugador Más Valioso de las Finales de la NBA en 2015.

Los Mavericks, que contaban con un plantel reducido, sin Anthony Davis y tres de sus pívots, ganaron tres partidos consecutivos antes del domingo, pero se encontraron con un equipo de Warriors en racha.

Celtics frenan la remontada Knicks

Con Jayson Tatum rozando el triple doblede, los Celtics de Boston sofocaron un intento de remontada de los Knicks de New York para imponerse por 118-105.

Los Knicks estuvieron cerca de levantar una desventaja de 27 puntos en el tercer cuarto, pero los locales reaccionaron para asegurar su tercera victoria del curso frente a estos emblemáticos rivales de la Conferencia Este.

Tatum comandó a Boston con 25 puntos, 10 rebotes y 9 asistencias, secundado por su socio Jaylen Brown, con 24 tantos.

El dominicano-estadunidense Karl-Anthony Towns logró 24 puntos y 18 rebotes para unos Knicks que nunca arrojaron la toalla pese a remar siempre desde detrás.

Los Celtics dominaron la primera mitad apoyándose en su enorme volumen de tiro exterior.

Boston, el equipo que más triples lanza de la NBA, realizó el domingo 44 de sus 91 tiros de campo (48 por ciento) desde más allá de la línea de tres puntos, convirtiendo 17 de ellos (39 por ciento).

Los locales tenían una cómoda ventaja de 77-50 al inicio del tercer cuarto antes de que los Knicks defendieran su orgullo en el TD Garden de la mano de Towns, que logró 14 puntos en ese periodo.

Después de un parcial de 12-32, el equipo neoyorquino se plantó a sólo cuatro puntos de los Celtics (89-85), que respiraron con dos triples seguidos del base Derrick White.

Los Knicks no resistieron ese acelerón de Boston y vieron además como Towns se lastimaba la pierna derecha en una entrada a canasta y se marchaba al banco con grandes gestos de dolor.

Pese a su visible cojera, el pívot regresó a la cancha y se mantuvo hasta el final de un juego totalmente controlado por los Celtics, que celebraron su quinta victoria seguida.