Ciudad de México. Oliver Rowland sigue en plan grande y luego de ganar en la Ciudad de México y quedarse a nada de llevarse el triunfo en la ronda tres en Jeddah, logró un triunfo con autoridad en la cuarta fecha, en la misma pista donde un día antes Maximilian Günter le arrebató la victoria a unos metros de llegar a la meta.
El británico se hizo de la segunda posición para largar en su Nissan; y desde ahí, dominó desde la punta gran parte de la carrera capitalizando una gran actuación.
Tuvo una pelea con el novato Taylor Barnard de McLaren durante varias vueltas, pero la experiencia, y por ende, mejor gestión de los recursos por parte de Rowland, le dieron las opciones para despegarse y marchar solo hacia la meta.
Con este triunfo, Rowland ya acumula 68 puntos en el campeonato, cifra que lo coloca como el líder del serial, al igual que a Nissan Fórmula E Team, que de momento está en la cima del campeonato de constructores.
“Estamos muy contentos de haber conseguido nuestra segunda victoria de la temporada tras la P2 de ayer. En la carrera, Oli ahorró energía al principio, lo que le permitió colocarse adelante y empujar. La estrategia fue perfecta, manteniéndose alejado de los problemas cuando era necesario y tomando la cantidad justa de Modo Ataque en el momento adecuado”, comentó el director General y jefe de Equipo de Nissan Fórmula E, Tommaso Volpe.
Si todo sigue con este ritmo, Rowland tiene serias opciones a pelear por el título, puesto que Nissan ha opuesto un auto competitivo y el británico parece estar disfrutando del momento, conduciendo de gran manera y llevando los errores a su mínima expresión.
“El auto ha ido fantástico todo el fin de semana, han sido dos carreras muy diferentes, pero hemos rendido muy bien los dos días. Es increíble liderar los tres campeonatos, pero nuestra atención se centra en ir carrera a carrera y hacerlo lo mejor posible para estar en una buena posición al final de la temporada”, expresó Rowland.
A pesar de la gran carrera de Nissan y Rowland, quien dejó más que sorprendidos a todos fue el novato Taylor Barnard, ya que de manera insólita, obtuvo la pole position y se convirtió en el piloto más joven en conseguirla con 20 años 259 días de edad.
El tercer puesto fue para el piloto anglosajón de Maserati MSG Racing, Jake Hughes, quien se mantuvo entre los punteros desde la arrancada, tras haber largado en esa misma posición, luego de la clasificación previa.
El jovencito de Gran Bretaña ya tiene tres podios en cuatro carreras y se instala de momento en la segunda posición en el campeonato de pilotos con 51 puntos, 17 menos que Rowland y 12 más que Antonio Félix da Costa de Porsche.