El Congreso Nacional Indígena (CNI) y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), condenaron “la emboscada ocurrida en la zona limítrofe entre Santo Domingo Petapa y San Juan Mazatlán, Oaxaca, en la que fueron asesinados tres compañeros de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (UCIZONI)”.
En un comunicado difundido la noche de este jueves, denunciaron que “esta violencia no es un hecho aislado, sino parte de la guerra de exterminio que los malos gobiernos, los caciques y los intereses capitalistas imponen contra nuestros pueblos. Buscan despojarnos de nuestras tierras con terror, persecución y muerte, al servicio de intereses oscuros”.
Exigieron que se haga “justicia para nuestros hermanos caídos, respeto a la autonomía de las comunidades indígenas y la garantía de seguridad para la población de El Platanillo”, al tiempo que responsabilizaron “a los gobiernos estatal y federal por su omisión y complicidad en esta escalada de violencia”.
Aseguraron que “todo aquel que no baja la cabeza y se convierte en siervo de la 4T es perseguido, desplazado, encarcelado y asesinado. Son lo mismo y son los mismos. Frente a sus golpes: ¡resistencia y rebeldía! en defensa de la madre tierra y sus guardianes”.
El CNI y el EZLN expresaron su solidaridad “con UCIZONI y con todas las comunidades indígenas que, a pesar de la represión, siguen en pie de lucha, defendiendo la vida y la dignidad”.
Demandaron un “alto a la guerra contra los pueblos indígenas, al despojo y a la represión”.