Ciudad de México. En las calles y negocios no se dejarán de ver anuncios con ofertas y promociones para que los consumidores acudan a ver la edición 59 del Supertazón este domingo. Los comercios formales inundan de logotipos y colores oficiales sus instalaciones y llegan a vender hasta pizzas con forma de balón de futbol americano.
El alcance de un encuentro de este tipo va más allá, y los comercios han aprovechado, desde hace varios años, la marca y el día, pues resulta muy redituable hacer promociones y transmitir el juego más esperado del año para los amantes del deporte o los espectadores de ocasión.
Cuando viene este día comienzo a pedir playeras y gorras desde una semana antes que se saben los que juegan. Son playeras de algodón con el logo de los equipos y de un jugador que en temporada regular se venden en 300 pesos y para el Supertazón las puedo dar hasta en 500 y la gente las compra, sobre todo el domingo del partido; es el día bueno, la gente adquiere sin importar el precio
, afirma José Luis Zaragoza, comerciante de productos deportivos en redes sociales.
“Las alitas siempre han sido un buen negocio, más los fines de semana o cuando es puente y si es el Supertazón meto promociones, muy pequeñas, pero me sirve porque pongo una tele, lo transmito y la gente se queda más tiempo del normal, aunque deben comprar comida, pues ya después consumen bebidas y esas son más caras… Entonces, si en un día normal, por ejemplo, vendo 5 mil pesos, ese domingo entran hasta 10 o 12 mil pesos”, menciona Sara Rodríguez, quien tiene un puesto de alitas y cervezas en el norte de la ciudad.
Durante varios meses, las marcas preparan a los consumidores para que el día del Supertazón el gasto vaya al alza. De acuerdo con el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (Lacen) de la UNAM, el día del juego el gasto promedio de las gente es de mil pesos.
El dinero se queda aquí
Una de las ventajas que tiene este día es que se generan mayores ingresos para las franquicias el domingo del Supertazón y, al ser empresas registradas en nuestro territorio, el dinero se queda en México, dijo Ignacio Martínez, el director del Lacen.