Ciudad de México. Gracias a los estudios moleculares y de patología, actualmente se puede saber qué características presentan los diferentes tipos de tumores cancerosos, tener diagnósticos más finos y proporcionar fármacos específicos, destacó la investigadora del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM, Sandra Romero Córdoba.
En el marco del Día Mundial contra el Cáncer, que se conmemorará el 4 de febrero, expuso que detectar de manera temprana esta enfermedad determina la esperanza de vida y que los tratamientos sean menos agresivos y costosos. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), los tumores malignos fueron la tercera causa de muerte en los mexicanos en 2024.
Hubo 47 mil 439 fallecimientos, de los cuales 24 mil 896 correspondieron a hombres y 22 mil 542 a mujeres, según las Estadísticas de Defunciones Registradas. Los fallecimientos representan aumento del 4.5 por ciento -dos mil 82 más- con respecto a 2023 cuando se reportaron 45 mil 357 por estos padecimientos.
Romero Córdoba señaló que debido a los avances de la medicina genómica es posible observar los tumores a través de marcadores moleculares como la expresión de proteínas o alteraciones puntuales en el ADN, y también ver cada una de los seis mil 500 millones de letras del DNA, del genoma del tumor.
“La alteración somática ocurre en las instrucciones moleculares particulares del tumor y son distintas a las del resto de las células del paciente. Actualmente es posible describirlas porque la lupa es mucho más fina y nos da más información que nos permite dar seguimiento, incluso en tiempo real, como en los nuevos abordajes de biopsia líquida, a fin de ir hacia una medicina de precisión; que conozcamos cada vez más a los tumores y podamos tener más opciones de tratamiento”, explicó.