Báez Melo informó que a finales de febrero la Conagua inicia trabajos de dragado y limpieza dentro del vaso regulador de dos hectáreas de superficie, “por lo cual, en ese tiempo estarán dejando la presa básicamente sin agua, para extraer todos los azolves que se juntan en esta presa y, que también, son los causantes más importantes de los olores que se generan”.
Explicó que a finales de febrero y en la primera semana de marzo, la Conagua ingresará con personal, equipo y maquinaria para comenzar a retirar el azolve, que llega por desfogues del Río San Joaquín, el cual cruza por las alcaldías Cuajimalpa y Huixquilucan, y en temporada de lluvias aumenta el arrastre de lodos y basura.
Báez Melo comentó que, en el 2024, la dependencia federal llevó a cabo trabajos de desazolve, pero tres años anteriores no se realizaron, y aquí lo fundamental es que se realicen cada año; pues el vaso regulador que mide al menos dos hectáreas, al momento acumula una nata de lodos malolientes de dos metros de alto.
El año pasado la Conagua desazolvó el 40 por ciento de la presa, y se espera que para este 2025 la asignación de recursos federales sea mayor para tener mejores resultados en el control de contaminantes por acumulación de lodos y basura, indicó el funcionario,
Sin embargo, detalló que el problema de contaminación de la cuenca, exige inversiones integrales, para la colocación de plantas de tratamiento de aguas residuales y control de descargas domiciliarias, pues estimó que entre 30 mil a 40 mil casas localizadas en Cuajimalpa y Huixquilucan, envían sus residuos al Río San Joaquín que finalmente, llegan al embalse.
Manuel Báez expuso que, en tanto, con el aval de la Conagua, el Sistema de Aguas de Huixquilucan cada semana vierte bacterias que minimizan los olores que emanan la acumulación de lodo; asimismo, realizan la limpieza de colectores, retiro de desechos, la operación de una planta tratadora y se espera invertir en la construcción de colectores este año para aumentar el agua que se trata en la zona.
Mega limpieza en la presa El Capulín
En tanto, este jueves en coordinación con la Comisión del Agua del Estado de México (Caem), el Sistema Agua de Huixquilucan, con el despliegue de una fuerza de menos cien trabajadores, impulsó la primera mega limpieza en el embalse, así como reforestación, recolección de basura y retiro de maleza.
A lo largo de 8 kilómetros, sobre en el embalse y Río San Joaquín, entre la colonia San Fernando Lomas de la Herradura, se recolectaron alrededor de 15 toneladas de basura dentro y fuera de los afluentes, para reducir los malos olores que emanan de la presa, atender las demandas de los vecinos para prevenir problemas de salud y cuidar el ambiente.
Báez Melo comentó que a pesar de que “El Capulín” es de competencia federal, se destinan dos millones de pesos al año para labores de limpieza en los ocho kilómetros que se ubican dentro del territorio de Huixquilucan, y este 2025 se destinará una inversión cercana a los 16 millones de pesos para la modernización y mejoramiento de la infraestructura hídrica que comprende todo el territorio.