Huixtla, Chis. Pese a las nuevas medidas antimigrantes en Estados Unidos, integrantes de la última Caravana decidieron seguir caminando hacia el centro y norte de México en busca de oportunidades laborales.

Luego de descansar en esta localidad, el contingente autodenominado “Caminemos todos juntos”, con más de 2 mil extranjeros, retomó su andar por la costa de Chiapas.

“Seguimos en la caravana, el plan es llegar a nuestra meta, nosotros lo estamos haciendo por la vía legal esperando, nosotros llevamos aquí siete meses esperando por la CBP One para que nos saliera nuestra cita, este señor la quita, pues no nos queda otra opción que seguir adelante y buscar la manera de cómo entrar a los Estados Unidos, porque esa es nuestra meta y lo vamos a lograr” expresó Karelis Parra, de Venezuela.

La sudamericana consideró que las decisiones de Trump afectan a miles de personas que lo único que piden es una oportunidad para una mejor vida, ya que huyen de la violencia, la pobreza y la persecución política en sus países.

“Hay personas que tenemos mucho tiempo aquí en México sobreviviendo, digámoslo de esa manera, porque tenemos que pasar hambre, dormir en la calle, pasar necesidades, privarnos de que acá no nos dan la oportunidad de un empleo. Entonces venimos, hacemos el sacrificio de dejar a nuestras familias, de vender nuestras cosas para venirnos a un mejor futuro”, agregó.

Dulce Moncada, de 30 años, dijo sentirse nerviosa y un poco a la deriva ante las nuevas restricciones en el país vecino, sin embargo, consideró quedarse en México antes que volver a Venezuela.

“Mi pensar es llegar a Ciudad de México y que la presidenta de México nos permita trabajar, ya que estamos aquí, por lo menos yo soy venezolana, venimos de muy lejos y para regresarnos con las manos vacías no podemos” , abundó.

La mujer que viaja con su esposo y dos hijos comentó que llevaba tres meses en Tapachula en donde había trabajado limpiando casas y en un supermercado, pero los ingresos no eran suficientes.

La caravana “Caminemos todos juntos” salió los primeros minutos de ayer lunes 20 de enero, justo el día que Donald Trump asumió la presidencia de Estados Unidos. Es el décimo tercer contingente que intenta salir de la frontera sur en menos de cuatro meses.