Chilpancingo, Gro. A poco más de 15 días de que la hidroeléctrica Mexhidro, ubicada en el municipio de Cutzamala de Pinzón, provocó la muerte de más de 100 toneladas de mojarras tilapia por falta de oxígeno en la presa El Gallo, funcionarios del gobierno estatal recibieron a una comisión de pescadores en palacio de gobierno.
Antonio Serratos, uno de los afectados, explicó vía telefónica, que los representantes gubernamentales les ofrecieron darles una respuesta en otros 15 días, pues primero se lo harían saber a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, “para que esto vaya caminando”, comentó.
Al encuentro, realizado el 9 de enero, asistieron funcionarios de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural (Segadregro) y de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), entre otros, “y ojalá nos ayuden”, refirió.
“Yo le comenté (a los funcionarios), que siempre cuando uno va a esas reuniones, le dan a uno buenas esperanzas; pero ya después queda en el olvido todo. Por esta tragedia unos 300 pescadores resultamos afectados”, manifestó.
Serratos mencionó que vieron una buena intención por parte de los funcionarios del gobierno estatal. “Esperamos que esas personas no nos dejen solos; al menos eso nos prometieron, ayudarnos”.
El pescador recordó que hace dos años “nos sucedió lo mismo, y también fuimos a Chilpancingo, pero no se le dio seguimiento al problema de ese entonces; hoy esperamos que se le dé continuidad a nuestra demanda”.
A finales de diciembre pasado, pescadores de la región denunciaron la mortandad de más de 100 toneladas de peces en la presa El Gallo, concesionada a la empresa Mexhidro, quien debido a sus actividades provocó la muerte de las especies.
Los pescadores afectados pertenecen a ocho cooperativas ubicadas en los ejidos de La Cañada, Arroyo Seco, La Joya, La Laja, La Playa, El Pinzán, Ojo de Agua y El Salitre, pertenecientes al municipio de Cutzamala de Pinzón, en la Tierra Caliente de Guerrero, y al de Tiquicheo, Michoacán, que colinda con la entidad guerrerense.
En la presa El Gallo se producen de 20 a 30 mil toneladas de peces, los cuales se venden principalmente en el Mercado de la Viga, en la Ciudad de México.
Los afectados denunciaron que su actividad disminuyó a partir de 2013 por las actividades de la hidroeléctrica, la cual redujo el flujo de agua y la oxigenación en la zona de pesca, lo que perjudicó la producción en las jaulas de los cooperativistas.
Los pescadores señalaron que la empresa Mexhidro, construída en 2007, obtiene ganancias de hasta un millón de dólares por día, al surtir de electricidad a la capital del país, y a los estados de México, Morelos y Michoacán, así como a los municipios de Acapulco, Chilpancingo, Zihuatanejo e Iguala, en Guerrero, y a grandes corporativos.