Beirut. Más de 100 combatientes murieron en los últimos dos días en enfrentamientos en el norte de Siria entre grupos armados respaldados por Turquía y fuerzas kurdas sirias, informó este domingo el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Desde el viernes por la noche, los combates en aldeas alrededor de la ciudad de Manbij han dejado 101 muertos, 85 de ellos miembros de grupos sirios proturcos y 16 de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS, dominadas por los kurdos), indicó a AFP el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.
En un comunicado, las FDS afirmaron haber repelido "todos los ataques de mercenarios de Turquía apoyados por drones y la aviación de los turcos".
Los grupos proturcos reanudaron sus ataques contra las FDS al tiempo que movimientos rebeldes islamistas lanzaron el 27 de noviembre su ofensiva contra las fuerzas del presidente sirio Bashar al Assad, que fue derrocado once días después.
Los proturcos consiguieron arrebatar a las FDS las ciudades de Manbij y Tal Rifaat, en el norte de la provincia de Alepo. Los combates continúan desde entonces, con numerosas bajas.
Según Abdel Rahman, el próximo objetivo de los grupos proturcos es tomar las ciudades de Kobane y Tabaqa, luego Raqa y finalmente expulsar a las FDS de los territorios bajo su control.
Las FDS controlan amplias zonas del noreste y parte de la provincia oriental de Deir Ezzor, donde los kurdos establecieron una administración autónoma tras la retirada de las fuerzas gobernantes al inicio de la guerra civil siria en 2011.
La vecina Turquía considera a las FDS una extensión de su enemigo jurado, el Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK, kurdo turco), y el ejército turco ataca regularmente a combatientes kurdos en Siria y en Irak.
El nuevo dirigente sirio y líder del grupo islamista Hayat Tahrir al Sham (HTS), Ahmad al Sharaa, declaró que las FDS deben integrarse en el futuro ejército sirio.
HTS lideró la coalición de grupos rebeldes que anunció el 8 de diciembre, tras entrar en Damasco, la caída del gobierno de Assad. Esta coalición controla la mayor parte del país.