Puebla, Pue., De 2022 a 2024, la empresa Concesiones Integrales pagó 6.13 millones de pesos por derechos para la extracción de agua en cuatro pozos del municipio de Nealtican, y en contraste recaudó 234.67 millones de pesos durante el mismo periodo para abastecer con ese líquido a un total 42 mil 037 usuarios, según reconoció el Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Puebla (Soapap) a través de la solicitud de información 210423624000053.

Habitantes inconformes con la sobrexplotación de los mantos acuíferos en la demarcación hicieron la petición de datos correspondiente el pasado 22 de octubre, en la que preguntaron al organismo el monto anual que se paga a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) por los derechos y volumen del líquido otorgados en el título de concesión número Pue100304.

El Soapap respondió que en 2022 se pagó un millón 773 mil 502.17 pesos por concepto de derechos y volumen de agua; en 2023 el monto fue de un millón 767 mil 556.8 pesos y en 2024 la suma pagada por dicho concepto fue de 2 millones 592 mil 302.88.

De la anterior información se desprende que en tres años la empresa pagó 6.13 millones de pesos por derechos de concesión a la Conagua.

Cabe subrayar que los inconformes solicitaron información de 1997 a la fecha; sin embargo, el organismo sólo transparentó de 2022 a 2024.

En contraste, dio a conocer que Concesiones Integrales recaudó en tan sólo tres años un monto de 234.67 millones de pesos por concepto de abastecimiento del líquido en la ciudad de Puebla.

Pobladores se quejan de la escasez del recurso

Es decir, la compañía obtuvo ingresos 4 mil veces superiores a lo erogado por el pago de derechos de la licencia, mientras los pobladores de Nealtican se quejan de la escasez del recurso.

El año en el que Concesiones Integrales obtuvo más ingresos por el cobro del servicio fue 2023 con un monto de 88 millones 032 mil 750.35; seguido de 2022, con una suma de 80 millones 691 mil 023.74 millones de pesos. Asimismo, hasta octubre de 2024 sumaban 65 millones 948 mil 050 lo recaudado.

Francisco Castro Grande, uno de los habitantes que se oponen a una mayor sobrexplotación del agua en Nealtican, expuso que la respuesta que obtuvieron evidencia el tamaño del negocio de la firma. Si en tres años pagó 6 millones de pesos por los derechos de extracción de agua pero cobra más de 240, ahí está la magnitud del dinero que ganan, por eso quieren excavar más pozos en Nealtican.

Recordó que anualmente se extraen 6.5 millones de metros cúbicos de cuatro pozos ubicados en la población, cuya autorización fue obtenida luego de que en 1994 fueron encarcelados decenas de habitantes que protestaron por la excavación que se hizo.

En contraste, los vecinos del municipio ubicado a las faldas del volcán Popocatépetl se quejan por la escasez de líquido, tanto en la colonia Guadalupe Hidalgo como en el resto de la demarcación.

La falta de agua obliga a una parte importante de los 14 mil habitantes a abastecerse a través de pipas, además de que ya se secó el pozo de riego denominado Nealtican Citlali, por lo que exigieron que se deje de extraer líquido en el municipio, por la grave afectación que genera a la gente.

Además, se han secado otros tres pozos agrícolas y ha disminuido el potencial de dos a tres pulgadas en otras fuentes de abastecimiento.

Recordaron que hace 30 años se generaban grandes concentraciones de agua en las que había un número significativo de peces, lo que ahora no sucede.

El pasado 9 de diciembre, 2 mil personas reunidas en la plaza principal de dicha localidad acordaron el cierre definitivo de cuatro pozos operados por el Soapap, tras más de 30 años de sobrexplotación de los mantos acuíferos.

La decisión se tomó durante la cuarta asamblea de los pueblos cholultecas a la que se ausentaron representantes del organismo, Concesiones Integrales, la Conagua y la alcaldesa morenista Imelda Gil Osorio, quienes fueron invitados para exigirles información sobre los planes de perforar cinco pozos en el municipio sin consultar a la población.

En la reunión, el propio Francisco Castro, quien fue uno de los convocantes, denunció un intento de boicot por parte de la munícipe, al amedrentar con policías a quienes realizaron perifoneo el fin de semana para dar conocer sobre la junta que se efectuaría.

Asimismo, denunció que los gobiernos del estado y federal también actuaron para impedir que los representantes de comités de pozos agrícolas acudieran a la asamblea al llamarlos a una reunión a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.

El cierre de los cuatro pozos que el Soapap excavó en 1994 para llevarse el agua a la ciudad de Puebla no se ha llevado a cabo porque los quejosos se dieron un espacio de unas semanas para informarlo a sus respectivos comités; quedaron en reunirse otra vez en una fecha que no se ha concretado para concretar dicha acción.