Ecatepec, Méx. La Unión Industrial del Estado de México (UNIDEM) advirtió que la política migratoria que Estados Unidos implementará a partir de enero próximo representará grandes retos para México, ya que en los próximos meses podrían ingresar a México cientos de miles de connacionales y migrantes de otros países, por lo que el Gobierno Federal deberá tomar medidas para hacer frente a esta situación para evitar que se convierta en un problema social de grandes proporciones.
Francisco Cuevas Dobarganes, director de la agrupación, recordó que Donald Trump, quien asumirá la presidencia de Estados Unidos, ha anunciado en repetidas ocasiones que pondrá en marcha políticas proteccionistas que implican un control migratorio más estricto y la deportación de cientos de miles o quizás millones de migrantes que se encuentran de manera ilegal en la nación americana.
“Para nosotros como mexicanos eso representa un problema, ya que en este momento México se encuentra ya en una difícil situación debido la enorme cantidad de campamentos de migrantes que existen en gran varios estados de la República. De este modo, miles de migrantes provenientes de países como Haití y Venezuela, Guatemala, Colombia y Cuba, entre otros, están en espera de una cita para poder migrar de manera legal”, dijo.
Sin embargo, debido al cambio de gobierno en el país del norte, es poco probable que estas personas puedan cruzar la frontera en el corto y mediano plazo; lo cual se verá agravado por la repatriación de personas que ha anunciado Trump.
En un comunicado, Cuevas Dobarganes indicó que ante estos escenarios, si el gobierno federal necesita tomar medidas encaminadas a que los migrantes logren mantenerse por sí mismos, sin ser una carga para el país.
“Es importante que el gobierno considere la posibilidad de legalizar su estancia temporal y con ello puedan emprender algún negocio o acceder a un empleo, sin penalizar a los empresarios que les ofrecieran un trabajo, tal y como sucede actualmente", explicó.
Destacó que la posibilidad de tener un empleo formal, permitiría a los migrantes poder acceder al IMSS Bienestar, ya que además de la falta de empleo, de ingresos y vivienda, enfrentan condiciones de vida insalubres.
"Se nos viene un problema de grandes proporciones que pocos están dimensionando. Depende de la sociedad, junto con el gobierno y los empresarios, que estas personas puedan convivir de manera armónica y contribuir con el desarrollo de nuestro país, o bien, que se conviertan en una carga insostenible, o lo que es peor, que acaben participando en actividades ilícitas o incluso uniéndose al crimen organizado".