El precio del kilogramo de uva verde sin semilla en los mercados Medellín y 24 de Agosto, en las colonias Roma y Narvarte, respectivamente, es de 200 pesos, es decir, 80.34 por ciento de un día de salario mínimo –que es 248.93 pesos– y a 88.50 por ciento del de un kilogramo de bistec, que en la alcaldía Benito Juárez cuesta 226 pesos.
En un recorrido, los vendedores aseguraron que el costo es por la alta demanda para celebrar el Año Nuevo; sin embargo, mencionaron que a diferencia de otros años, en esta temporada hubo menor abasto de esa fruta, que en su mayoría viene de Perú y Estados Unidos.
Mencionaron que no hay forma de sustituirla por otra fruta, porque los arándanos –blueberries– cuestan lo mismo, pues el cuarto de kilo alcanza 50 pesos; no obstante, señalaron que entre el domingo y lunes los productores podrían sacar las uvas de origen nacional, pero advirtieron que posiblemente sean de menor tamaño y quemada
, por el tiempo que lleva en refrigeración.
En algunos locales del primer centro de abasto la uva llega a 210 pesos, mientras que en el Juárez, de la alcaldía Cuauhtémoc, es de 160 pesos; en tiendas de autoservicio el producto etiquetado como uva blanca sin semilla tiene rebaja: en Walmart, pasó de 99 pesos a 89, mientras en Soriana de 110 a 69.80 y en La Comer se mantiene en 149 pesos.
Pedro Martínez, quien atiende un local en el mercado Juárez desde hace 36 años, dijo que ante la proximidad del fin de año el precio ya no baja, pero no sabemos si vaya a subir o se mantenga
, tras recordar que el año pasado el kilogramo costó entre 100 y 120 pesos.
Mencionó que sus clientas le dicen: o comemos carne o fruta
, al referir que es rara la persona que compra un kilo, la mayoría lleva de un cuarto a máximo medio kilogramo
; la que podría ser una opción es la uva roja sin semilla, que se mantiene en 120 pesos.
Entre las consumidoras hubo opiniones divididas, como Consuelo Herrera, quien dijo que es mucho, la uva ya no se compra
, mientras explica que su gasto para la cena de fin de año será de alrededor de mil 500 pesos porque tiene el pavo que recibió una de sus hijas en el trabajo.
En el mercado Medellín, Aída Martínez, quien vive en Cancún pero está de visita en la capital, opinó que se me hacen precios muy caros, es un lujo, ya es un exceso. Está bien que sean las tradiciones o rituales, pero rebasa nuestro bolsillo
; Ana, residente de la colonia Narvarte, aseveró que las uvas son parte de la cena, es comida y en eso no se debe escatimar mientras se tenga dinero; además, es parte de la convivencia familiar
.
Una comerciante que se instala afuera del mercado Medellín y vende brochetas con seis uvas cubiertas de chocolate, mencionó que siempre se ponen caras en la temporada
, al asegurar que los consumidores se llevan su producto en 35 pesos.