Ciudad de México. La secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Alicia Bárcena, calificó este lunes como “histórico” el Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y a la Sustentabilidad firmado este día, por los compromisos que han adquirido todos los niveles de gobierno para concretarlo.
En el contexto del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, Bárcena resaltó el trabajo realizado entre Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) por dar cimientos a este proyecto y agradeció a los gobernadores de los 32 estados del país por colaborar para derivar en la firma del acuerdo. “La implementación del acuerdo sólo será posible con todos”, expresó.
Al ser parte del Plan Nacional Hídrico (2024-2030), presentado el pasado jueves, explicó que la firma da un valor al agua y lo reconoce como un derecho humano y con ello se busca aumentar la productividad agrícola e industrial y la distribución del líquido entre la población.
Indicó que este pacto sobre el agua representa “un cambio de paradigma, un paso hacia un modelo integral de desarrollo sostenible, que supere la visión extractivista, privatizadora y desigualadora del periodo neoliberal”. Para alcanzar esta visión indicó que “implica valorar y proteger el ciclo del agua como un bien nacional, como un bien público que tenemos que proteger todos y todas los ciudadanos”.
Alertó que en México la escasez de agua afecta a 35 millones de personas de manera desigual, a 104 de las 757 cuencas hidrográficas y a 114 acuíferos que están seriamente afectados, sobreexplotados y contaminados. Resaltó que a más de 80 por ciento de los municipios que han sufrido estrés hídrico y sequía.
“Por ello, es tan urgente gestionar eficazmente el agua, incentivar su tratamiento y su reuso, y qué bueno que estamos aquí para ver las aportaciones voluntarias, porque eso va a ser central, ¿para qué?, para aumentar la productividad agrícola e industrial, pero a la vez, para asegurar una mejor distribución social dentro de todo nuestro territorio”, resaltó.
Destacó que con la implementación del plan y el pacto se debe aplicar la reforestación de los bosques y el cuidado de los humedales para contrarrestar los efectos del cambio climático. Además, resaltó que con ambas medidas es imperante la restauración de los ríos Lerma-Santiago, Tula y Atoyac.
El objetivo principal de este proyecto, señaló, es garantizar el derecho humano del agua, asegurar la sostenibilidad de los recursos producidos en el país, fomentar un cuidado y manejo responsable del líquido y avanzar en la seguridad alimentaria del país.
Por su parte, Efraín Morales López, titular de la Conagua, inició que desde hace varios meses la comisión inició un diálogo con los principales consumidores del sector industrial “para que de manera voluntaria devolvieran parte del agua que tienen bajo concesión” que no la utilizan sin comprometer sus producciones ni los planes de crecimiento que tienen
Como resultado, precisó que un grupos de empresas regresarán al gobierno 126 millones de metros cúbicos y se comprometieron a realizar inversiones de más de 21 mil millones de pesos para eficientar, tratar y reusar el vita líquido en sus procesos industriales o en obras de carácter comunitario, mientras que 67 distritos y unidades de riego se comprometieron a retornarán a más de 2 mil 800 millones de metros cúbicos del líquido, lo que equivale a tres años de consumo en la Ciudad de México.
De estos encuentro se derivó en diez compromisos, entre los que figuran: garantizar el derecho al agua en cantidad y calidad suficiente, el uso eficiente del agua en los procesos productivos de las actividades industriales, agrícolas y pecuarias y que todos los niveles de gobierno se comprometan a invertir en materia de infraestructura para impulsar proyectos.
El secretario de la Sader, Julio Berdegué Sacristán, destacó que el acuerdo es “histórico”, entre otras razones, porque lo 67 distritos, integrados por miles de productores, participan de manera voluntaria, y su aportación significa a un año de consumo de agua en el país. Aseguró que han involucraron porque con la tecnificación de los riegos en el campo producirán hasta 50 por ciento más en ciertos cultivos.