Querétaro, Qro. En la víspera del 25 N, este domingo integrantes de los colectivos feministas Adax Digitales y We R Women On Fire colocaron "tendederos" con fotos y fichas de mujeres que han sido víctimas de feminicidios, desapariciones forzadas y de otros delitos en la Plaza de la Corregidora, al pié de la gran heroína de la Independencia,Josefa Ortiz de Domínguez.
Luego de que las integrantes de ambas agrupaciones terminaron de colocar las fotos y fichas, nombraron a cada una de las víctimas para las cuales exigieron justicia.
Mencionaron el caso de la desaparición de las jóvenes Joselín Hernández Ramírez y Liliana Padrón Casas, que de acuerdo a las fichas de búsqueda de ambas fueron vistas por última vez el sábado 25 de mayo de este año.
En el caso de Liliana Padrón, de 20 años de edad, se encontraba alrededor de las 14 horas en la parada de autobuses del municipio de Arroyo Seco, ubicado en la sierra queretana. Iba a tomar un autobús rumbo a Jalpan de Serra donde se reuniría con su amiga Joselín.
Ese mismo día y a la misma hora, según la ficha de búsqueda de la segunda joven desaparecida, Joselín de 17 años, se encontraba en el centro de Jalpan de Serra y vestía un pantalón corto blanco y una blusa negra. De acuerdo con sus familiares había acudido al centro a buscar dónde podrían reparar su celular.
La distancia entre Arroyo Seco y Jalpan de Serra es de aproximadamente 30 kilómetros. Desde esa fecha nada se sabe sobre ambas mujeres.
Según Dayana Pérez,una de las integrantes de Adax Digitales,la colocación de tendederos tuvo como fin el "visibilizar y concientizar a la ciudadanía sobre la violencia que se ejerce hacia nosotras las mujeres".
Aseguró que Querétaro es el estado que tiene tercer lugar a nivel nacional de violencia digital contra las mujeres.
"Nombramos a las compañeras desaparecidas, a las madres, hijas y mujeres que arrebataron de sus familias, a las mujeres que fueron vejadas, violentadas y asesinadas", agregó .
"Nuestra voz se convirtió en la de muchas, porque no estamos todas, nos falta Joselín y Liliana, así como muchas mujeres a nivel estatal y nacional".
Ante esta preocupación, la activista exigió a los tres niveles de gobierno la puesta en marcha de políticas públicas para prevenir la violencia contra las mujeres, "así como mecanismos de atención con perspectiva de género y que los procesos jurídicos dejen de ser revictimizantes".
Advirtió que "seguiremos nombrándolas y tomando los espacios públicos aunque les incomoda a muchos, porque ellas no son cifras, son vidas que fueron arrebatadas.¡No están solas, aquí está su manada!".