La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo evitó opinar de la polémica relección al frente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) de Rosario Piedra Ibarra.
“Es una decisión del Senado la que se tomó ayer. Y hasta ahí”, dijo la mandataria sin ahondar más en el tema.
Al cierre de su conferencia matutina de este miércoles en Palacio Nacional, se le lanzó la pregunta fuera de micrófono sobre la designación de Piedra Ibarra para un segundo periodo al frente del organismo (2024-2029), sin embargo, la Presidenta no profundizó.
Esta madrugada, tras una sesión de más de 13 horas, el Senado de la República avaló con el voto en bloque de Morena y sus aliados la reelección de Piedra Ibarra en la presidencia de la CNDH.
Esto ante el intento de la oposición por frenar el proceso y ante los llamados de diversos organismos defensores de derechos humanos de no elegir de nuevo para el cargo a la funcionaria.
La semana pasada, Sheinbaum Pardo se aseguró que la familia de Piedra Ibarra, en particular su madre, doña Rosario Ibarra de Piedra —fundadora del Comité Eureka y una férrea activista por la presentación con vida de los desaparecidos durante la guerra sucia—, era un “símbolo” en la lucha contra la represión del Estado.