Chilpancingo, Gro. Germán Reyes Reyes, imputado por el homicidio del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, fue recluido en el penal estatal como medida preventiva, en tanto se desahogan las pruebas en su contra; en la audiencia de vinculación realizada la noche del martes, la Fiscalía General del Estado (FGE) lo acusó con la versión de un testigo muerto y lo relaciona con el grupo criminal Los Ardillos; el inculpado aseguró que es un “chivo expiatorio.”

La FGE, a cargo de Zicpacná Jesús Torres Ojeda, señaló que Reyes Reyes privó de la libertad al edil en un rancho del municipio de Quechultenango y ordenó su asesinato por oponerse a nombrar a supuestos miembros del grupo delictivo en su gabinete.

La audiencia inició a las 17:30 horas del martes y concluyó a las seis de la mañana de ayer y se llevó a cabo en la Sala 1 del Juzgado de Control y Enjuiciamiento Penal del Poder Judicial estatal.

Pese a que el representante de la fiscalía pidió que la entrevista fuera privada por la gravedad del caso, la jueza Yolanda Mora Silva argumentó que la sociedad tenía derecho a conocer del tema.

El Ministerio Público informó que Arcos Catalán murió por una hemorragia masiva, causada por la decapitación con un instrumento contundente.

Tras el relato de hechos por parte de la fiscalía estatal, la jueza determinó prisión preventiva para Germán Reyes en el Centro de Readaptación Social de Chilpancingo, apartado del resto de reclusos, debido a que se desempeñó como fiscal especial de Delitos Graves y por abordar casos de alto impacto que pondría en riesgo su seguridad.

A partir de ayer, el ex encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) municipal, tiene 144 horas para presentar pruebas de su inocencia por el asesinato del alcalde Alejandro Arcos, surgido de la coalición PRI-PAN-PRD. La segunda audiencia tendrá lugar el próximo 18 de noviembre.

El ex funcionario municipal fue detenido el 12 de noviembre alrededor de las 13 horas, cuando se encontraba en la SSP local; posteriormente, cerca de las 7 de la noche lo presentaron ante la jueza de control Yolanda Mora, en la Ciudad Judicial.

A partir de su detención, Germán Reyes solicitó la presencia de los medios de comunicación, a quienes declaró su inocencia, y que su aprehensión tenía “tintes políticos porque era un chivo expiatorio".

Sostuvo que no conocía personalmente Arcos Catalán, pues la primera vez que habló con él fue cuando este lo llamó para una entrevista de trabajo, en donde lo designó como encargado de despacho de la SSP de Chilpancingo.

El teniente retirado denunció que fue detenido sin una orden de aprehensión vigente; además, él no tenía motivos suficientes para planear la ejecución del munícipe.

Recordó que cuando hallaron el cadáver del edil, el 6 de octubre pasado, Reyes estaba comiendo al sur de la capital, desde donde se trasladó al lugar del crimen.

En su declaración, destacó que es un “chivo expiatorio” debido a la presión que ejerce la ciudadanía por conocer y detener a los responsables del asesinato.

Manifestó que en el desahogo de pruebas “quedó asentado que fue detenido a la una de la mañana del 12 de noviembre, lo cual es mentira”, porque lo arrestaron a la 1:30 de la tarde de ese día.

Al momento de su detención no se le presentó ninguna orden de aprehensión por lo que “jurídicamente es improcedente la detención y presentación ante los juzgados”, acusa su abogada.

En respuesta, la jueza del caso declaró que la abogada particular “no conoce el procedimiento del nuevo sistema de proceso judicial penal”, por lo que se asignó a un defensor de oficio.

Del señalamiento de que lo arrestaron sin orden de aprehensión, la juzgadora indicó que “es un error de dedo que deberá ser valorado por el sistema judicial”.

Germán Reyes es abogado en Derecho, con especialidad en Juicio Oral y Proceso Penal Acusatorio; además, es litigante en materia penal; en la estructura militar fue capitán de Justicia Militar. En la administración pública se desempeñó como fiscal regional de Delitos Graves, y director del Penal de Investigación Criminal en la FGE. También fue muy cercano a la ex fiscal general Sandra Luz Valdovinos. El 3 de octubre anterior fue designado como encargado del despacho de la SSP por Alejandro Arcos.