La Habana. Mientras el huracán Rafael se alejaba de Cuba este jueves por la mañana adentrándose en el Golfo de México, la isla buscaba recuperarse de su paso por el occidente; el evento ocasionó un apagón nacional que se mantiene en gran parte del país.
La capital, una de las zonas más afectadas por los vientos y aguaceros de Rafael, amaneció con un cielo nuboso pero pocas lluvias que caían, por momentos, pero con violencia, tras una madrugada de fuertes ráfagas que lo sacudían todo.
Mientras, se dejó ver un escenario de árboles caídos que cortaban calles céntricas, postes eléctricos por el piso y algunos derrumbes, constató The Associated Press.
“Se cayó toda la pared frontal del edificio, la que da a la calle”, dijo con tono afligido a la AP, José Ignacio Dimas, un residente de Centro Habana que llegó en la mañana del jueves a su hogar, luego de trabajar toda la noche en una guardia en la Universidad, para encontrarse con la sorpresa. “Estaba muy mal la construcción, se filtraba agua, yo me temía que este desastre pasaría algún día”, lamentó.