Brasilia. El Banco Central de Brasil subió las tasas de interés medio punto el miércoles, acelerando el ritmo de endurecimiento, en un momento en que se enfrenta a unas perspectivas de inflación más complicadas.
El comité de fijación de tasas del banco, conocido como Copom, votó por unanimidad elevar su tipo Selic de referencia a 11.25 por ciento, tal y como se esperaba.
En una encuesta realizada por Reuters entre 34 economistas, 30 preveían un aumento de medio punto, mientras que cuatro esperaban una subida de un cuarto.
“El ritmo de los futuros ajustes de la tasa de interés y la magnitud total del ciclo de ajuste monetario (...) dependerán de la evolución de la dinámica de la inflación”, explicó el comité en un comunicado.
La inflación en septiembre en la mayor economía latinoamericana repuntó a 4.42 por ciento en 12 meses, en especial por la subida de los alimentos y la energía, impulsados por la sequía histórica que vive el país.
Para 2024, el mercado augura una inflación de 4.59 por ciento, según la encuesta Focus del Banco Central publicada el lunes.
El Copom también intensificó los llamados para que el gobierno demuestre la credibilidad de sus objetivos presupuestarios, advirtiendo que “la percepción de los agentes sobre el escenario fiscal ha impactado significativamente en los precios de los activos y las expectativas”.
La creciente preocupación por el aumento de la deuda pública de Brasil ha debilitado el real brasileño en los últimos meses y ha presionado al alza las tasas de interés a largo plazo.
El gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva señaló que presentaría esta semana medidas para frenar el gasto y reforzar las normas fiscales aprobadas el año pasado.
El ministro de Hacienda, Fernando Haddad, dijo el miércoles que las conversaciones al respecto habían concluido y que todos los ministros eran conscientes de la necesidad de “garantizar la previsibilidad y la sostenibilidad de las finanzas a medio y largo plazo”.