Con uno más que se les suma, agudizan ante el Consejo de Seguridad la matanza en Palestina. El poderío que da la Carta de la ONU a cinco países desmiente la frase de que todas las naciones son iguales. La propia estructura de ese organismo internacional cierra la opción de un cambio como si ese documento fuera sagrado y los otros países lo permiten. En esta votación, Harris y Trump actúan con la soberbia del permiso y el poderío. Es una lección terrible para que nos movamos cada quien, no sólo cambiando a nuestro país, sino transformando el mundo.
Tere Gil
Punto de quiebre para los ministros de la Suprema Corte
Para los ministros de la Suprema Corte de Justicia la cuestión es muy sencilla: o votan a favor de la iniciativa del ministro González Alcántara Carrancá, que rechaza términos de la reforma judicial –la cual ya es parte integral de la Constitución–, o se oponen al proyecto. Si votan a favor de la iniciativa de Alcántara estarían violando la Constitución. Es decir, estarían en flagrancia cometiendo un delito de lesa democracia, como diría don Pablo González Casanova.
Los ministros que voten a favor estarían quebrantando el estado de derecho, incumpliendo la promesa de cumplir y hacer cumplir la Constitución y provocando una crisis constitucional. Y ante ello no puede haber impunidad. Deben ser sancionados conforme al derecho. Y es necesario alertar a los trabajadores y al pueblo en general para movilizarse y defender la Constitución. Del mismo modo a la Presidenta, ya que la derecha alienta la crisis para tratar de defenestrarla.
Mario Saucedo Pérez
¿Habrá disculpas por parte de los reyes?
¿Disculpas?
¿Tampoco habrá esta vez razón
para que los reyes ofrezcan disculpas a los habitantes de las zonas afectadas por inundaciones en su país?
Juan Manuel Hernández
Nuevos clamores de la ONU se levantan ante agresión del sionismo
Nuevos clamores de la Organización de Naciones Unidas se levantan ante la persistente agresión del sionismo en contra de diversos pueblos y naciones.
La paz mundial está en riesgo, por el respaldo que las potencias de Occidente, encabezadas por Estados Unidos, prestan a los genocidas. Y lo peor es que, con toda seguridad, tienen preparada una guerra nuclear.
La cosecha de mártires, producto del holocausto del ejército de Netanyahu, se incrementa día a día. Ayer fueron 146 en Palestina y en Líbano; y aun cuando el embate de muerte es indiscriminado, afecta sobre todo a personal de hospitales, niños, mujeres y trabajadores de la agencia de la ONU encargada de apoyar a las víctimas.
En la franja de Gaza la situación es angustiante. Dice un comunicado suscrito por la Organización Mundial de la Salud, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para Refugiados, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios y Oxfam: Toda la población palestina de esa región se encuentra en riesgo inminente de muerte por enfermedad, inanición y violencia (por lo que exigen) que el Estado de Israel cese su asalto a Gaza y a los trabajadores humanitarios
(La Jornada, 2/11/24, p. 20).
Ni un momento debemos dejar solos a los pueblos agredidos por quienes dan continuidad a la presencia del nazismo y del fascismo en nuestro planeta.
Palestina, y ahora también la ONU, merecen todo nuestro respaldo para que logren su sobrevivencia.
José Enrique González Ruiz
Supervisión emocional casa por casa
Deben aplaudirse las visitas a personas de la tercera edad y discapacitados. Tienen ese derecho.
Ahora bien, el contacto con ellos puede producir un intercambio emocional que debe trabajarse. Para ello, las experiencias de los doctores José Cueli y Carlos Biro, con el modelo de sicocomunidad –basado en el sicoanálisis–, permiten desarrollar esos encuentros en la mejor atmósfera posible y lograr objetivos paralelos al servicio, como la promoción al desarrollo de comunidad.
Esto significa que los visitadores llevan a cabo una supervisión emocional por semana, para evitar que se abrumen. El grupo debe contar también con un asesor en materia de salud. Es trabajo de un grupo que interactúa con otro. Además, es necesario que se fije el encuentro una vez por semana con cada familia durante un año máximo (cinco familias por visitador como límite) por el esfuerzo emocional que significa este ejercicio. La comunidad visitada puede luego continuar el impulso a su desarrollo; otro objetivo. Bajo ese esquema se logran resultados; si no, se abortan.
Jesús Alveano H.