Ciudad de México. Con las fotografías de sus hijas, hermanas y sobrinas, en medio de flores de cempasúchil, veladoras y papel picado, familiares de víctimas de desaparición y feminicidio instalaron un “altar por la memoria” en la llamada Glorieta de las Mujeres que Luchan, en Paseo de la Reforma.
En víspera del Día de Muertos, el primero y dos de noviembre, destacaron que estas fechas son también “para exigir verdad y justicia” por las mujeres que han sido víctimas de estas violencias que se siguen perpetrando en el país.
Entre las fotografías que fueron colocadas están las de Lesvy Berlín Osorio, asesinada por su entonces pareja en mayo de 2017 en Ciudad Universitaria; la de Diana Velázquez Florencio, víctima de feminicidio en julio de 2017 en Chimalhuacán, estado de México, al igual que las imágenes de madres buscadoras ultimadas como Teresa Magueyal, en mayo del 2023 en Celaya, Guanajuato.
Lidia Florencio, madre de Diana, admitió que estas acciones para recordar y pedir justicia por sus hijas genera a las familias sentimientos encontrados: “hay dolor en mí, me duele ver la fotografía de mi hija en este espacio, pero también me llena de satisfacción porque sé que la lucha que hemos hecho todas las mujeres rinde frutos, porque en cada mujer que nombra a Dianita, sé que hay una justicia social”.
Otra de las asistentes fue Sonia López, tía de Fátima Cecilia, víctima de secuestro agravado y feminicidio a los 7 años de edad, quien destacó en entrevista que además de que con esta ofrenda se busca recordar que en México siguen presentándose estos casos, “también es nombrar a las mujeres como lo merecen: dignamente. Mostrar que ellas tienen nombres, rostros y familias que les extrañan”.
Expresó que “es muy difícil pasar estos días sabiendo que Fati, quien era una niña, tendría que estar saliendo a pedir dulces, pero estamos en un acto conmemorativo para ella y para otras”.
Las familias, acompañadas por colectivos feministas, también colocaron fotografías de mujeres desaparecidas en las vallas metálicas que rodean el antimonumento, como la de Pamela Gallardo, quien desapareció el 5 de noviembre de 2017 en la alcaldía Tlalpan.
A la glorieta, igualmente acudieron mujeres que han padecido o padecen cáncer de mama, quienes instalaron un tendedero de brasieres color negro para recordar a sus compañeras que fallecieron por esta enfermedad.
“¡Porque vivas, vivas estamos!, ¡vivas nos queremos!”, “¡Ni una asesinada más!”, y “¡No es un hecho aislado, los feminicidios son crímenes de Estado!” , fueron algunas de las consignas que expresaron.