Washington y Nueva York. Los estadunidenses están descubriendo, una vez más, que los dueños multimillonarios de grandes medios no necesariamente son guardianes de la independencia editorial cuando sus intereses empresariales están en juego en una elección, como fue el caso del Washington Post cuando anunció esta semana pasada que no endosará a ninguno de los dos candidatos presidenciales en esta contienda.
Jeff Bezos, calificado por Forbes como el segundo hombre más rico del mundo como dueño de Amazon, ordenó que su periódico rompa con una tradición de casi 5 décadas de endosar a candidatos presidenciales. Como resultado de la decisión, renunciaron algunos integrantes de la junta editorial y algunos escritores de opinión y más de 250 mil lectores, según NPR, cancelaron sus suscripciones (un 10 por ciento del total).
Bezos, obligado a responder ante estas reacciones, defendió la decisión en una declaración publicada en primera plana del Post e insistió en que no tenía que ver para nada con sus intereses empresariales. Pero como su primer editor en jefe Marty Baron señaló en su libro, Bezos enfrentó intensa presión del entonces presidente Donald Trump incluyendo intentos para negar contratos gubernamentales a Amazon por la cobertura crítica del Post de su presidencia.
“Esta es cobardía, con la democracia como su víctima. Donald Trump percibirá esto como una invitación para continuar intimidando a dueño Bezos (y otros)”, comentó Baron en X al comentar la decisión. “Es la falta preocupante de columna vertebral en una institución famosa por su valentía”, concluyó. Dos de los periodistas más famosos de la historia del Post, Bob Woodward y Carl Bernstein (quienes destaparon el escándalo de Watergate entre otras hazañas) comentaron que esta decisión a solo 12 días de la elección ignora “la evidencia abrumadora reportada por el Washington Post sobre la amenaza que representa Trump a la democracia”.
El mismo día que el Post anunció su decisión de no endosar a ningún candidato, ejecutivos de otra empresa de Bezos, Blue Origin, sostuvieron una reunión con Trump en Florida. “No hay ninguna conexión entre eso y nuestra decisión sobre endosos presidenciales”, insistió Bezos aunque pocos dentro de su propio periódico y otros creen a esa afirmación.
Pero el Post no está solo. Este mes, el multimillonario dueño de Los Angeles Times también anunció que su rotativo no endosaría a un candidato presidencial este año. El respaldo la demócrata y californiana Kamala Harris que ya se había preparado por el equipo de opinión fue desechado. Poco después, el editor de opinión del periódico renunció.
En la campaña de Donald Trump, estas decisiones fueron festejadas ya que se suponía que el Post, periódico de la capital, y el Los Angeles Times, el rotativo más grande del estado de California en donde nació y empezó la carrera política de la candidata demócrata, apoyarían a Harris.
Esta semana el periódico nacional USA Today también anunció que no endosará a nadie, aunque no queda claro si la firma de capital de inversión que es dueña indirecta del rotativo tuvo algún papel en esa decisión.
Pero en los últimos 10 días, y a una semana de la elección, tres de los principales cinco periódicos del país han decidido no endosar a ningún candidato presidencial.
“La libertad de la prensa es garantizada sólo para aquellos que son dueños de una”, concluyó el periodista A. J. Liebling en el The New Yorker hace más de 60 años.