Ciudad de México. Después de año y medio de no recibir su beca deportiva, el clavadista Osmar Olvera finalmente percibe el estímulo económico que le corresponde por sus resultados a nivel internacional.
“De mi parte ya recibo mi beca, se nos devolvió a Juan (Celaya) y a mí, justo antes de que se fuera Ana. Ahora estamos más tranquilos y podemos entrenar al cien por ciento. Estamos optimistas tras la llegada de Rommel porque está preparado y quiere hacer las cosas bien”, dijo el capitalino, ganador de dos medallas en los Juegos Olímpicos de París.
El especialista en trampolín de uno y tres metros disfruta sus últimos días de descanso pues está cerca de iniciar su preparación rumbo a Los Ángeles 2028.
“En noviembre regresa mi entrenadora Majin de China y vuelvo a los entrenamientos, queremos ganar a los chinos cueste lo que cueste y por eso espero que se me autoricen campamentos a ese país".
El próximo año, el reto más importante de Osmar es el Campeonato Mundial, donde espera presentar saltos de mayor grado de dificultad.
“Uno de ellos sería el de cuatro y media vueltas que me da una ganancia de cuatro décimas, ya lo ha realizado en entrenamientos pero todavía no está perfecto".